Este 4 de octubre de 2022, el actor Pablo Lyle fue encontrado culpable de homicidio involuntario por la muerte de Juan Ricardo Hernández, de 63 años, en marzo de 2019. Según las cámaras que registraron la agresión, todo empezó con una discusión en una calle de Estados Unidos .
Tras escuchar su sentencia, el histrión mantuvo la calma y se despidió enviando un beso a su familia, que se encontraba presente en una corte de Miami, después fue esposado. Recién el 26 de octubre se conocerá cuánto tiempo deberá estar en prisión. Según las leyes de Florida, él podría pasar entre 9 y 15 años tras las rejas.
En tanto, la familia del fallecido se mostró conforme. “[Estoy] sin palabras. [Fue] la justicia del Señor”, señaló Tanya Charry, su viuda. A continuación, te detallamos quién fue el sexagenario que dejó de existir días después de recibir los golpes del histrión, de 35 años.
Juan Ricardo Hernández era un hombre de origen cubano. Llegó a los Estados Unidos de manera legal hace varios años, pero él no fue solo sino con su pareja Mercedes Arce y su hijo, donde se asentó y comenzó una nueva vida.
Sus padres permanecían en Cuba y mantenía contacto de manera constante con ellos. Su madre Silvia aseguró que su hijo era una persona muy buena y nada agresiva, algo que fue corroborado por el hijo de Juan.
Los hechos se remontan al 31 de marzo de 2019 en la ciudad de Miami, debido a un incidente de tráfico. En aquella ocasión, Juan Ricardo Hernández bajó de su carro y se dirigió al vehículo en el que se encontraba manejando el cuñado de Pablo Lyle; en la unidad estaba su esposa, hijos y el propio actor. El sexagenario le reclamó por haberle cerrado el paso.
En medio de la discusión, su pariente desciende del carro y discute con el hombre, pero al notar que el vehículo empieza a moverse por sí solo, va tras él. En ese momento, baja Lyle y va de frente a Juan Ricardo y le lanza un puñete, haciendo que se desplome y su cabeza se golpee en el pavimento. Todo fue registrado por las cámaras de seguridad de una gasolinera cercana.
Hernández sufrió una lesión traumática cerebral y tras permanecer cuatro días hospitalizado, dejó de existir.
Se dio a conocer que cuando ocurrió el incidente, el cubano había sido operado de la rodilla, por lo que no podía caminar bien el día de la agresión.
“Dos vidas destruidas por un simple enojo en una vía de circulación, una situación que ocurre con demasiada frecuencia en nuestras calles y en las calles del país”, señaló la fiscal estatal de Miami-Dade, Katherine Fernández-Rundle respecto al caso.
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