“El Chavo del 8″ es uno de los programas humorísticos más vistos en la historia de la televisión de habla hispana. La comedia, creada por Roberto Gómez Bolaños, salió por primera vez al aire en 1971 y rápidamente conquistó al público con cada uno de los personajes de la vecindad.
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El elenco principal estuvo integrado por Gómez Bolaños, Ramón Valdés, Carlos Villagrán, María Antonieta de las Nieves, Florinda Meza, Rubén Aguirre, Angelines Fernández y Édgar Vivar, que interpretaron al Chavo, Don Ramón, Quico, la Chilindrina, Doña Florinda, el profesor Jirafales, Doña Clotilde y el señor Barriga, respectivamente. Estos personajes se ganaron el corazón de varias generaciones.
Quienes han visto el programa recordarán un episodio en donde ‘El Chavo’ empieza a encontrar platos que han dejado misteriosamente en su barril y esto se atribuye a los espíritus chocarreros. Un término que quedó grabado en la memoria de los televidentes y que aquí te contamos qué significa.
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El show creado por Roberto Gómez Bolaños tiene varios capitulos memorables, como cuando “El Chavo” empieza a encontrar platos que han dejado misteriosamente en su barril. Esto le causa mucha curiosidad y atribuye el inusual hecho a seres del ‘más allá’.
Luego, ‘La Bruja del 71′ explica que se trata de los espíritus chocarreros, responsables de todos los fenómenos paranormales que ocurrían dentro de la vecindad. Este término se quedó grabado en la memoria de los televidentes y los fans de “El Chavo del 8″ han intentado averiguar qué significa.
Pero ¿qué son los espíritus chocarreros? El término hace referencia a aquellos fantasmas que no son dañinos o malignos, sino que son burlones e inofensivos.
Según La Real Academia de la Lengua Española, ‘chocarrero’ es aquella persona que hace ‘chocarrerías’. Es decir, bromas de mal gusto, chistes o alguna gracia obscena que genera incomodidad.
En el capítulo en mención, los platos que eran dejados en el barril del ‘Chavo’ supuestamente eran realizados por fantasmas que se alojaban en la casa de ‘Don Ramón’ para hacer bromas. Sin embargo, se descubrió que el padre de la ‘Chilindrina’ era quien sacaba los trastos de su casa porque era sonámbulo.
El éxito de “El Chavo Del 8″ fue tal que, para 1973, era transmitido en varios países de Hispanoamérica y tenía altos índices de audiencia televisiva. Se estimó que en 1975 era vista por más de 350 millones de televidentes cada semana.
Dada la popularidad, el reparto realizó una gira internacional que abarcó varios de los países en los que se transmitía el programa en ese entonces, en una serie de presentaciones donde bailaban y actuaban en vivo frente a un público.
En 1978, Villagrán dejó el programa de forma definitiva debido a conflictos con Gómez Bolaños respecto a la autoría del personaje de Quico, y al año siguiente hizo lo mismo Valdés debido a motivos personales. A pesar de ello, este último se reincorporó al programa tiempo después.
La última emisión de “El Chavo del 8″ como programa independiente se dio el 1 de enero de 1980, aunque continuó como parte de Chespirito hasta el 12 de junio de 1992. Gómez Bolaños consideró que el impacto de la serie en otros países se debía al éxito previo de El Chapulín Colorado.
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