El cambio climático en el Perú es una problemática de largo arrastre, ya que inició con el deshielo progresivo de los diversos glaciares en la zona central del país, como también el aumento de la temperatura en zonas tropicales, en adición los fenómenos del niño y la niña que en los últimos años han puesto en jaque a miles de empresarios, productores agrícolas, etc. y esta situación viene en aumento con las recientes manifestaciones climáticas en las distintas regiones del país.
Ahora, se ha especulado que el aumento de los precios en alimentos de primera necesidad como de otros elementos esenciales en la vida cotidiana, tiene que ver con problemas meramente económicos, cuando en realidad es una combinación de muchos factores y uno de ellos es el cambio climático. Sobre ello, y combatir este fenómeno en Perú se ha considerado reducir en un 31% de sus Gases de Efecto Invernadero (GEI) para el 2030, además propone reducir en 25% la población vulnerable frente al calentamiento global en ese mismo periodo de tiempo, esto de acuerdo con el marco propuesto por la la cumbre sobre el clima de la ONU, conocida como COP26.
Desde el sector empresarial se puede apoyar y de sobre manera el avance del cambio climático y ahí donde comienza el desafío más importante pues requieren de mejorar sus sistemas de contabilidad ambiental. Foto: Pexels.
Ante ello, Cristián Bustos, especialista en sostenibilidad y CEO de BEEOK startup dedicada a la promover la sostenibilidad empresarial desde la tecnología, resalta que “desde el sector empresarial se puede apoyar y de sobre manera el avance del cambio climático y ahí donde comienza el desafío más importante pues requieren de mejorar sus sistemas de contabilidad ambiental, especialmente en las emisiones de gases de efecto invernadero que impactan directamente a la huella de carbono.”
El especialista en sostenibilidad menciona también que las herramientas tecnológicas se han convertido en principales aliados ante esta constante lucha, pues evita procesos complejos, lentos y hasta poco precisos, lo cual es perjudicial tratándose de un tema de vital importancia.
En la actualidad existen programas y plataformas permiten al sector corporativo identificar inmediatamente sus emisiones. Foto: Pexels.
En ese sentido, Bustos brindó tres recomendaciones para las empresas que aún no han iniciado este trabajo o buscan replantear su agenda con el medio ambiente:
Ir con objetivos desde el día uno:
Establecer y trabajar hacia objetivos basados en la ciencia y necesidades actuales climáticas
Contar con un trabajo conjunto entre los equipos de finanzas y sostenibilidad:
Se ha demostrado que los estudios financieros y de sostenibilidad aportan en esta tarea como diagnóstico y evaluación constante
Invertir en tecnología:
En la actualidad existen programas y plataformas permiten al sector corporativo identificar inmediatamente sus emisiones, como también cuantificarla, lo que los ayudará a iniciar un plan de trabajo y tomar decisiones con el fin de llegar a la neutralidad en la emisión de carbono.
Finalmente, Bustos comentó que “La crisis climática es transversal a lo que sucede en el país, como en muchos otros de Latinoamérica que cumple la función de brindar productos primarios a grandes potencias como EE. UU y Europa. Es fundamental trabajar, por ejemplo, en un mercado regulado de carbono y como este apunta a más y mejores inversiones en soluciones basadas en la naturaleza y de esta manera tratar de frenar el avance del cambio climático”.
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