| Los provincianos son hombres y mujeres pujantes que muchas veces dejan su terruño para buscar oportunidades en la capital. María Gonzáles quien es de Ayacucho y su esposo Pablo Valverde de La Libertad llegaron a Lima con la ilusión de trabajar por sus hijos. Vendían canchita en las calles y ferias y luego algodón en parque Kennedy de Miraflores. Al apostar por los picarones, Gastón Acurio los invitó a Mistura y los catapultó al éxito. está en el documental Street Food de Netflix y ahora son conocidos a nivel mundial. Después de tener carritos ahora cuentan con dos locales y sus hijos siguen con el legado.

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Doña María ¿qué tan complicado es tener un negocio de picarones?

Lo complicado es preparar la masa, se necesita fuerza porque lo hacemos de manera artesanal, hay que batir hasta encontrar el punto.

Cuenta la historia que llegaron de provincia para emprender en Lima, ¿qué recuerdos tiene?

Soy de Puquio, Ayacucho y mi esposo es de Santiago de Chuco en La Libertad, llegamos con el sueño de buscar nuevas oportunidades para nuestra familia. Al inicio vendíamos canchitas en la calle, en las ferias, en los juegos mecánicos. Luego esposo puso un carito de algodones dulces en el Parque Kennedy de Miraflores, mientras que yo seguía vendiendo mi canchita.

¿Cómo deciden hacer picarones?

Mi esposo me dijo para hacer picarones, y no sabíamos nada. Estuvimos meses haciendo recetas para probar hasta que dimos con la masa perfecta.

¿Cuándo fue el momento clave para que este emblemático dulce se haga conocido en el mercado?

Fue cuando Gastón Acurio llegó a nuestro carrito y nos invitó a participar en Misturo, estuvimos en varias ediciones y nos fue muy bien. La gente nos empezó a conocer y eso nos ayudó mucho.

¿Qué comentarios recibe de sus clientes acerca del producto?

Nos dicen que son muy buenos, les gusta la atención que les damos. Estamos sorprendidos por el cariño de los turistas, quienes llega a visitarnos porque nos han visto en el documental de Netflix.

¿Cuántos años tienen en el mercado?

Estamos 20 años haciendo picarones y luego hemos incursionado con dulces peruanos.

Siempre han tenido sus carritos para vender, ¿por qué deciden abrir un local?

La pandemia nos hizo cerrar los carritos que eran los puntos de venta y tuvimos que abrir un espacio en la casa para ofrecer los productos para llevar, la demanda nos obligó a tener un espacio.

¿Cuántos locales tiene ahora?

Dos locales, uno en Surco y el otro en San Borja. Además, tenemos un camioncito con el que vamos a eventos.

Aparecer en la plataforma de Netflix les habrá cambiado la vida…

La verdad que sí, tuvimos un reconocimiento a nivel mundial en lo que es la gastronomía peruana, se dió a conocer el anticucho, los picarones, el ceviche en el extranjero.

Ahora, sus hijos se están haciendo cargo del negocio, ¿qué cosas nuevas aportan a la marca?

Nelinho, pablo, Josimar y Andres, quienes son mis hijos, me han ayudado a innovar con postres nuevos en la carta, ahora tenemos torta de chocolate, crema volteada, empanadas y otros productos. Además, me han ayudado con temas de digitalización con boletas electrónicas, modernización de locales, entre otros.

¿Cómo se adaptaron en pandemia?

Implementamos el canal de delivery, pusimos el nuestro, pero era tanta la demanda, que tuvimos que utilizar aplicativos.

¿Tienen pensado abrir más puntos de venta?

Si, ese es el objetivo, pero vamos de a pocos.

El peruano es muy dulcero, ¿qué postre sale más?

Nuestra marca es de picarones que es el postre top, luego las mazamorras y los pies de limón.

¿Qué aconsejarían a las personas que quieren incursionar en el negocio de dulces?

Ofrecer la cantidad y la calidad del producto, dar un buen servicio. Nosotros hemos capacitamos a muchos jóvenes que ahora tienen sus propios negocios.

¿Con cuántas personas trabajan?

Somos 10, desde la producción hasta la atención.

¿Cómo van en las redes sociales?

Mis hijos se encargan del tema, ellos hacen el contenido a diario.

¿Dónde los podemos encontrar?

Jiron Preciados 106, Surco y en la avenida Aviación 2566 San Borja

Ping Pong:

  • Picarones: lo mejor que tenemos.
  • Dulces peruanos: tradición.
  • Provincianos: luchadores.
  • Un sueño: abrir un día en el extranjero.

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