Emprende Trome| ¿Sabía usted que en Moyobamba hay un vivero donde existen 700 especies de orquídeas y plantas exóticas, y que ya se exportan al extranjero debido lo que bellas que son? Por ese dato conocimos a Karol Villena, quien es bióloga y está a la cabeza de ‘Orquídeas Amazonicas’, un negocio familiar que nació en manos de sus padres, quienes le enseñaron lo que era trabajar duro.
Ella creció rodeada de naturaleza y recuerda con mucha nostalgia a su madre cuando se quedaba hasta la madrugada sembrado, pues distribuían plantas para otros negocios. Recibió una invitación para una feria en Alemania, y desde ese entonces no ha parado de recorrer el mundo.
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Los clientes me contactan y me hacen los pedidos desde Singapur, Hong Kong, Corea, Japón, Europa, Checoslovaquia, Estados Unidos.
El vivero está desde 1984, mi papa es ingeniero agrónomo, cultivaba cítricos, mangos y hacia injertos, pero a mi mamá le encantaban las flores y las reproducía. La gente se fue pasando la voz, y se convirtió en un vivero de flores ornamentales y nos hicimos proveedores de orquídeas. Este negocio era una fuente de ingreso para la familia.
Estudié biología para tener conocimientos y al terminar la universidad, me dije: ¿Por qué no puedo exportar? Averigüé y recibí una invitación de una feria en Alemania y fue el inicio de tantos viajes. Yo decía soy peruana y se me abrían las puertas. Gracias a las orquídeas he viajado por todo el mundo representando a mi región y a mi país.
La falta de apoyo de las autoridades, son las piedras más grandes que encontré en el camino. Podemos competir con otros países, pero h tenido exportaciones frustradas. Está mejorando ahora, pero falta mucho.
Desde los 8 años ayudábamos a sembrar a mis padres. Ellos nos han enseñado a trabajar y no me canso, me gusta lo que hago. Me da nostalgia porque recuerdo a mi madre que no dormía por sembrar sus plantitas, tiene unas manos benditas, a ella todo le crece bonito.
Increíblemente son bien fuertes, vendemos las plantas vivas, han viajado conmigo en cajas dos semanas y llegan bien
Todo se ha puesto de moda, cosas que no imaginaba vender he vendido. Tengo mi catalogo surtido y me piden como locos de afuera. Las exportaciones en general de plantas se han incrementado a nivel de Perú y nos ha ayudo salir de esta crisis.
He visto que en Lima pecan por exceso de cariño hacia sus plantas, le compran su abono, vitaminas, solo les falta que le pongan una bufanda. Las orquídeas son fuertes, y resistentes.
Imagino que han buscado un tipo de distracción y qué bueno que fueron las plantas, que son naturaleza, selva y vida. La gente empezó a coleccionar y a comprar, y nos han ayudado mucho al sector.
Perdimos producciones de plantas porque no podíamos ir al vivero. Pagar a trabajadores, debí tener un fondito para emergencias, pero aprendí para un futuro.
La orquídea Kovachi que fue descubierta y dio vuelta al mundo, es una especia muy linda, de un color muy llamativo, su potencial genético es enorme en el extranjero y el mundo de las orquídeas.
La forma, el color, la textura, las rarezas les gustan.
Con 45 personas, tenemos la casa de centro de venta y dos y media hectáreas de casas mallas para cultivar en Moyobamba y un punto de venta en Tarapoto.
Es variable. Hay 700 especies y no todas se cultivan igual, pero en general en un año y máximo año y medio. Otras de dos a 3 años.
Frustrante, da miedo invertir, me han recomendado abrir un vivero en Estados Unidos, todo depende de la coyuntura, pero me costaría irme y dejar a mi gente y mi Moyobamba. Trato de ser optimista por el bien de todos.
Diversidad: Moyobamba
Orquídea: Mi casa.
Perú: Corazón
Dato: Perú Flora convoco a floricultores del Perú, quienes han encontrado en una gran vitrina para contactar a nuevos clientes y dar a conocer la diversidad de este rubro.
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