Y pensar que todo empezó con una relación económica: oferta y demanda. Sebastián Penco es el ‘9′ del Sport Boys que lleva en sus espaldas un apelativo singular. Cada día va disfrutando mucho más su estadía en un país que ya no le es tan ajeno..
Cuando jugaba en Independiente de Avellaneda, una marca me pagaba 100 pesos por cada festejo simulando que manejaba uno de sus productos.
Prefiero la acuática que no es tan peligrosa.
Me costaría comprarle, me daría temor.
Ya no.
La causa, el pulpo.
Sí, pero sin ají, sino me queda ardiendo la boca.
Las ‘Caras de Atahualpa’.
Es uno de mis orgullos.
La escucho, suena bien y cuentan bonitas historias.
Solo doy un mismo paso.
Con mi esposa. Tomo sus manos, me muevo lo que pueda y a ella siempre le va a parecer que lo hago bien.
Ese concepto era antes, pero cambió.
Es que debemos cumplir otras funciones como retroceder, cubrir espacios. Si tu compañero está mejor posicionado, no hay problema en dársela.
Creo que solo 3 clubes en el mundo llevan el rosado y eso me gustó.
Es lindo ser distinto a todos.
Causa o chibolo.
Claudio Torrejón es un especialista.
Paolo de la Haza siempre se junta a compartir.
El primer lugar lo tengo yo y bastante lejos del segundo puesto.
En Argentina le eché pizza al frasco de shampoo de un compañero.
Pasto a los bolsos.
Corto verduras, las meto al horno con un pedazo de carne y sale delicioso.
Lavo los platos y pongo la mesa.
Si yo la puse, mi señora la levanta y viceversa.
Con la ansiedad de regresar a los entrenamientos.
Antes de la pandemia siempre con la mano.
Hola rey, ¿cómo andás? o ¿qué hacés, crack'?
A ustedes y cuando gusten estoy para conversar.
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