El presunto asesino de Daniel Correa Freitas, su esposa e hija de 18 años han caído en contradicciones, lo que hace sospechar que el móvil del asesinato no se trataría de un intento de violación. La policía ha empezado a sospechar de los tres implicados, ya que desde que se entregaron a la justicia su coartada no ha podido ser comprobada, por lo que la muerte del futbolista podría haber sido producto de la violencia desproporcionada de Edson Brittes Júnior, quien habría matado a golpes al jugador en su propia casa y posteriormente llevado su cuerpo a un bosque, donde finalmente fue encontrado.
De acuerdo a las nuevas investigaciones, la madre de Daniel Correa Freitas entregó la conversación que mantuvo con la joven Allana Brittes al no tener noticias de su hijo. En el diálogo de whatsapp, la joven le miente a la preocupada madre y le da una versión que no se ajusta a la declaración que dio a través de un video y ante la policía.
En ella, la sospechosa de participar en el asesinato colectivo del joven futbolista, contó a la mamá de Daniel Correa Freitas que este se había ido de la fiesta en la madrugada y que "de repente se quedó en un hotel de la zona", pero que iría con sus papás a buscarlo. Horas más tarde, cuando se supo de su muerte a través de las noticias, Allana Brittes escribió nuevamente "Dios Mío, no lo puedo creer"
Tras el hallazgo del cuerpo de Daniel Correa Freitas golpeado, degollado y con los genitales mutilados, la policía ha dado prioridad al caso, pero sobre todo a las razones por las que fue asesinado con tanta crueldad el jugador de 24 años. Sus victimarios aludieron, en su primera manifestación, a que la víctima intentó abusar sexualmente de Cris Brittes (esposa), pero las contradicciones entre sus declaraciones posteriores hacen creer que el motivo del asesinato son los celos y la ira descontrolada que le generó al asesino escuchar a su mujer acusar al futbolista de intento de violación.
Además, las imágenes de Whatsapp y un testigo anónimo, pusieron en jaque la coartada. Primero, porque el asesino declaró que él mismo le puso la pijama a su mujer y hasta le lavó los dientes, pero según las fotografías que Daniel Correa Freitas le compartió a su amigo antes de morir, se puede ver a la mujer maquillada y con el vestido de fiesta.
Posteriormente, la joven de 18 años dijo que Daniel Correa Freitas no era su amigo, sino un conocido y que ella no lo había invitado a su fiesta, pero la conversación con la mamá de la víctima la desmintió y en su cuenta de Instagram (ahora cerrada) había posteado una foto hace un año con el mismo jugador durante una fiesta en su casa.
CONTRADICCIONES DEL ASESINO
Tras dar su manifestación y publicar un video donde cuenta detalles y las razones del asesinato del futbolista, las autoridades también han descubierto inexactitudes en sus declaraciones, sobre todo luego que se filtrara una conversación en el que Edson Brittes Júnior habla con un amigo y le cuenta una historia distinta a los hechos, pues al enterarse de la desaparición de Daniel Correa, este le manifestó que la víctima se fue borracho de su casa y que "de repente en el camino le pasó algo" y que lo despidió dándole un beso.
Todos estos detalles han hecho que las autoridades que ven el caso se replantearan la acusación de muerte por intento de violación (defensa propia) que libraría a los implicados de una condena como la cadena perpetua, a la que podrían ser sentenciados si se comprueba que se actuó con violencia desbordada con consecuencia de muerte.
El principal encargado del caso Amadeu Trevisan, parece tener indicios de lo que pasó y consideró que no es posible confirmar que Daniel Correa Freitas haya intentado abusar sexualmente de Cristiana Brittes.
"Nosotros ni siquiera sabemos si hubo una relación sexual entre los dos. Lo que tenemos es una foto que el jugador mandó a un amigo por el WhatsApp al lado de Cristina mientras dormía. Eso indica que la actitud de la víctima fue muy inmadura, pero la reacción de Edison fue desproporcionada. No había necesidad de tanta crueldad", concluyó.