Si bien el fútbol actual estuvo dominado por los genios Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, el siglo anterior fue testigo de varias disputas de estrellas como Pelé, Alfredo Di Stéfano, Franz Beckenabuer, entre otros. Uno de los más sobresalientes fue el portugués Eusebio, conocido como la “Pantera Negra”.
Nacido en enero de 1942 en Marques, Portugal, la leyenda portuguesa comenzó a jugar fútbol en un club de su localidad durante su juventud, pero fue a los 19 años que dio el gran salto de calidad tras fichar por el Benfica.
Sus grandes dotes con el balón hicieron que sea promovido al primer equipo de “Las Aguilas”, e incluso, formó parte de aquel inolvidable equipo que conquistó la Copa de Europa en 1962, torneo que hoy en día es conocido como la “Champions League”.
De hecho, Eusebio dijo presente en la gran final tras anotar dos goles ante el poderoso Real Madrid, que ya albergaba en sus filas a las leyendas blancas de Ferenc Puskas o Alfredo Di Stéfano. No obstante, no logró levantar otra vez tal torneo, pese a llegar en dos oportunidades más al último partido.
Fue tal su influencia que en 1964 estuvo a punto de fichar por el Inter de Milán, uno de los clubes más acaudalados de todo Italia. Sin embargo, debido a varias incidencias y fallos al momento del fichaje, la “Pantera Negra” no llegó a la escuadra milanista.
Posteriormente, logró convertirse en el primer ganador de tez oscura del Balón de Oro en 1965 tras sus destacadas actuaciones con Benfica y su selección. Tal honor evidenció que el talento de los futbolistas se hallaba en los pies y no en el color de piel.
Pero el legado de Eusebio no estaría completo sin su participación en torneos mundialistas. Fue en 1966 cuando el crack luso guió a su selección hasta las semifinales, cayendo ante el anfitrión Inglaterra por 2 goles a 1. No obstante, todos recordaremos su desgarradora fotografía llorando tras ser eliminado a manos de los ingleses.
Eso sí, la leyenda haría un muy buen torneo a nivel personal, logrando anotar tres goles ante Corea en cuartos de final y ser el goleador de la competición con 9 dianas en apenas cinco encuentros.
“Fui el mejor jugador del mundo, el máximo goleador de Europa, lo hice todo salvo ganar un Mundial”, sostuvo la “Pantera” en una entrevista a fines del 2011. Con Portugal anotó 41 goles en 64 encuentros, siendo unos números muy buenos para la época.
Si bien Cristiano Ronaldo fue el primer capitán en levantar trofeos con Portugal, lo hecho por Eusebio sigue siendo un argumento razonable para ser considerado como el mejor futbolista de su país en la historia, teniendo en cuenta que rivalizó directamente con verdaderos monstruos de la época como el argentino Alfredo Di Stéfano, el brasileño Pelé o el inglés Bobby Charlton.
Sus récords hablan por sí solos: tras disputar 15 temporadas en el cuadro de Benfica, Eusebio alzó 11 títulos nacionales, 5 copas de Portugal.
A nivel personal ganó la Bota de Oro al mejor goleador de todo Europa en 1968 y 1973. Su promedio goleador es de otro planeta, pues marcó 733 goles en 745 partidos. Todo esto se explica debido al talento innato que tenía la leyenda portuguesa dentro del campo de juego.
Eso sí, su club logró homenajearlo en vida construyéndole una estatua al frente del Estado de La Luz. Finalmente, el héroe lusitano abandonó Benfica en 1975 tras sufrir seis operaciones en la rodilla izquierda.
Su retiro se dio tres años más tarde, exhibiendo su última grande función en clubes estadounidenses y en equipos portugueses de segundo orden.
Aunque Eusebio falleció el 5 de enero del 2014, su legado será imborrable para el mundo del fútbol y los portugueses, quienes jamás olvidarán lo hecho por el primer jugador de color que ganó el Balón de Oro.
Como dijimos anteriormente, el impacto de Eusebio fue tal, que el día de su deceso en enero del 2014, las autoridades portuguesas decretaron duelo nacional por tres días en su honor. Una leyenda de leyendas.
Aunque se creó una serie de rumores y dichos entre ambos, Pelé y Diego Maradona tuvieron una relación de respeto debido a la enorme trayectoria de ambos. Incluso, el “Pelusa” llegó a invitar a la leyenda brasileña a su conocido espacio televisivo.
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