La tensión entre Neymar y el PSG ha llegado a su punto más difícil. El jugador brasileño esta dispuesto a a marcharse la próxima temporada a Barcelona y sabe que por las buenas es difícil que los parisinos le permitan su salida es por ellos que esta buscando forzar su salida aprovechando esta última reducción de sueldos que propone el club al plantel y buscar una figura legal para salir del club a dos años de la finalización de este.
Ya terminó la primera semana de mayo sin que exista un acuerdo entre ambas partes. PSG busca reducir el sueldo de toda la plantilla y Neymar es el abandero de los que muestran una negativa. Tampoco ha revisado siquiera la propuesta de renovación que tiene sobre la mesa desde el años pasado. Una clara muestra que no desea seguir en Francia.
Las posiciones entre Neymar y PSG están muy distanciadas. El brasileño solo se ha dedicado hablar dentro de la cancha. Esa es la táctica del crack brasileño, quien es consciente que ha recuperado una posición de fuerza a la hora de negociar, puede aprovechar esta coyuntura para forzar su salida. Pero la única salida es el diálogo, y sin la presencia de Leonardo (Director Deportivo), como interlocutor, por pedido del jugador.
En medio de las fórmulas el cuadro español solo esta decidido a desprenderse de tres jugadores Antoine Griezmann, Samuel Umtiti, o Ousmane Dembélé, a cambio de regreso de Neymar y de una cifra razonable para las arcas de Barcelona en tiempo de crisis.