El partido entre Dinamarca y Finlandia, por la primera jornada de la Eurocopa, se detuvo en el minuto 43 cuando Christian Eriksen se desplomó en la cancha. El jugador del Inter de Milán sufrió un paro cardiaco en plena actividad y después de largos minutos (incluso el duelo se suspendió y se jugó al día siguiente) fue atendido en el campo y llevado a un hospital.
A unas semanas de la imagen más impactante del certamen continental, uno de los testigos del incidente expresó todas las sensaciones que experimentó durante ese periodo de tensión. Martin Braithwaite, delantero del Barcelona, habló para el documental que producen Lucky Metal y 433 sobre el caso de su compatriota.
“Acabo de vivir una de las situaciones más terribles de mi vida. Lo que debía ser el evento deportivo más importante en la historia de Dinamarca se convirtió en una pesadilla”, inició el jugador de los catalanes en la entrevista en la que hasta ahora se muestra afectado por lo acontecido aquella jornada.
“Lo que ocurrió aquella noche fue un shock para mucha gente. Hubo un momento que le miré y él se había ido. Cuando lo ves o cuando ves su cuerpo... la persona está muerta, no hay duda. Lo sabes de inmediato. Es lo que vi”, agregó Braithwaite sobre la primera impresión que tuvo al ver tendido a Eriksen.
“Cuando le vi empecé a rezar mucho. Sentí que era la única cosa que podía hacer en ese momento. Mirar a Dios. Teníamos a todos los médicos trabajando en él y esa imagen... es algo que no deseo que nadie vea”, explicó el extremo para detallar sobre la reacción que tuvo en aquel complejo episodio.
Por suerte, Braithwaite, Eriksen, sus compañeros, el staff de la selección danesa y todo el mundo del fútbol ya puede respirar tranquilo porque lo ocurrido con el volante de los interistas solamente fue un susto. “Al final tuvimos un final feliz. Christian está bien y estable y esa es la única cosa que queríamos”, cerró.
¿Qué pasará con Eriksen?
En Italia, la prestigiosa cadena Sky Sport desveló que el futbolista de 29 años arribará la próxima semana a las instalaciones del Appiano Gentile, sede de Inter de Milán, para saludar a sus compañeros y al nuevo comando técnico encabezado por Simone Inzaghi. Enseguida, el danés pasará por todos los reconocimientos con los profesionales de la salud del club.
De acuerdo con la información del medio citado, los médicos del Inter desean trazar una hoja de ruta que tiene como finalidad retirar el desfibrilador cardíaco subcutáneo a Eriksen. Este aparato fue instalado hace unas semanas mediante una operación realizada en el Rigshospitalet de Copenhague.
No obstante, en caso los resultados de las pruebas médicas de los ‘neroazzurros’ sean positivos, Eriksen todavía debe esperar unos seis meses para volver a saltar a la cancha. Durante ese periodo, el internacional danés debe prepararse en todos los aspectos para retornar a la competición oficial.