Marruecos, es un país ubicado al norte del África y sus costas están bañadas por el Mediterráneo y el oceáno Atlántico. Durante siglos, debido a su estratégica ubicación, fue invadida por diversos imperios: Roma, Fenicia, Cartago, Bizancio, vándalos visigodos, árabes y finalmente Francia y España. Ahora ceklebran porque eliminó a Portugal en cuartos de final del Mundial de Qatar 2022 y pasó a semifinales, nada menos.
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Su nombre en árabe es Al-Magrib, que significa ‘El poniente’, mientras que para el resto del mundo es Marruecos, que deriva de una de sus primeras capitales, la ciudad de Marrakech. Los bereberes, pueblo que lo habita desde hace miles de años, la llama Murakuc.
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Hace poco, el nombre de Marruecos sonó fuertemente por el reconocimiento por parte del Perú de la República Árabe Saharaui, una entidad política no reconocida por la ONU y que a través del Frente Polisario busca una independencia al sur del Reino de Marruecos.
Este país es, además, un fuerte productor de urea, el fertilizante que escasea en el Perú y que el gobierno de Pedro Castillo no puede comprar desde comienzos de año.
Además, en el Mundial de México 70, hace 52 años, la blanquirroja goleó 3-0 a Marruecos con dos goles del ‘Nene’ Teófilo Cubillas y uno de Roberto Chale. Días antes los peruanos habiamos ganado a Bulgaria por 3-1.
Durante siglos fueron los nómades bereberes los habitantes de esta región, quienes adoraban a dioses paganos.
En el siglo VII el califato abasí de Bagdad, conquista toda la región del Magreb, integrada por Marruecos, Túnez y Argelia. El país es convertido al islam, religión dominante hasta ahora.
Desde el Magreb, los árabes lanzan sus ataques a Europa, logrando conquistar Portugal, España, el sur de Italia y las islas del Mediterráneo durante siglos.
Dinastías bereberes e imperios marroquíes como los almorávides y los almohades dominaron Marruecos y gran parte del noroeste africano, así como grandes territorios de la península ibérica o al-Ándalus, la actual Andalucía.
En el siglo XVIII, los europeos, como Francia y España se reparten Marruecos como zona de influencia, atraídos por sus recursos naturales y su estratégica ubicación como puerta del Mediterráneo.
No es hasta 1956 que Al-Magrib logra su independencia de ambos países. Ese mismo año se hace miembro de la ONU. Dos años después Hassan II se proclamó rey de Marruecos. Este país es una monarquía constitucional y de derecho divino al mismo tiempo. Algo así como la monarquía inglesa.
Sus ciudades más importantes son Rabat (la capital), Tánger (importante puerto en el Mediterráneo), Fez, Marrakech (ciudad con miles de años) y Casablanca, famosa por la película del mismo nombre filmada en 1942 y que lanzó a la fama a Humphrey Bogart e Ingrid Bergman.
Es un país montañoso, con grandes costas y también con desiertos, como el Sahara, completamente árido y que forma una barrera natural que lo separa de otros países.
Se habla mayormente árabe, en su dialecto marroquí, pero también lenguas bereber y francés, debido a el casi siglo y medio de dominación gala.
La cocina marroquí se caracteriza por su variedad de origen principalmente árabe y bereber con platos influenciados por la cocina judía. Sus platos más conocidos son cuscús, tajín, pastela, cordero asado, briouats (pequeños pasteles triangulares rellenas de carne o pescado).
Esta es Marruecos a vuelo de pájaro, el país que eliminó a la poderosa España del Mundial Qatar 2022 que ahora va a enfrentar al ganador del partido entre Portugal y Suiza.
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