Juan Pablo Pino es anunciado a los cuatro vientos como la gran contratación de Universitario de Deportes . No obstante, se trata de un jugador que difícilmente puede ser catalogado como profesional. Es más, en su país ya lo dan como retirado. Las cosas se deben decir como son, aunque duelan. Si incomodan, es por algo. ¿El colombiano merece venir a uno de los equipos más populares del Perú? Saca tus propias conclusiones luego de leer esto, te va a interesar.
“No he sido un profesional en todo el sentido de la palabra”, afirmó hace unos días Juan Pablo Pino, el flamante fichaje de Universitario de Deportes , quien está en medio de la polémica por su inactividad futbolística y los diversos problemas de indisciplina que han sido frecuentes en su carrera.
El ‘Mago’ Pino como se le nombró en sus inicios por la calidad que trataba el balón, fue eclipsado por su apego a la noche y el alcohol. Las noticias que abundan del atacante colombiano en internet no son precisamente de sus goles y gambetas.
Un ‘Mago’ retirado
“Fue considerado una de las grandes revelaciones del fútbol colombiano de los últimos años. A la altura de James Rodríguez (Real Madrid) o en este momento Marlos Moreno (de Atlético Nacional). Se pensó que era un jugador que podía llegar lejos por su versatilidad en ataque y calidad”, afirmó William Rodríguez periodista del Diario AS Colombia sobre Juan Pablo Pinto en declaraciones a Trome.pe.
“Pero desde el inicio tuvo problemas de disciplina. Le llegó muy rápido la fama y no tuvo estabilidad emocional para saberla manejar. A ello se sumó su apego a las rumbas (fiestas), licor y la noche. Tuvo recorrido en el exterior pero sin brillo. Para nosotros en Colombia Juan Pablo Pinto era un jugador retirado o por lo menos inactivo cuando se escuchó lo de Universitario. Siempre se le conoció como un jugador brillante pero con problemas en lo mental y emocional; nunca se le consideró un profesional a carta cabal”, argumentó William Rodríguez.
“Universitario contrató un jugador retirado. Cómo un club serio e importante de Perú puede fichar un futbolista de esas condiciones, con problemas de indisciplina que no le permitieron despegar en Europa. Juan Pablo Pino no tuvo presencias en el último año y medio. Es increíble. Ojalá pueda reivindicarse pero será complicado”, afirmó el periodista colombiano Mauricio Agudelo sobre Juan Pablo Pino.
Razón no les falta. Juan Pablo Pino fue figura de la selección de Colombia Sub 20 del 2007. Pero su actualidad señala que no tiene actividad futbolística desde el noviembre del 2014 con el cuadro filial Bastia II de Francia. En el primer equipo solo jugó 4 partidos tras su contratación en junio de ese año. A inicios del 2015 se le rescindió el contrato y no jugó más.
En noviembre del 2013 fue despedido de Independiente de Medellín por negarse a pasar un examen de alcoholemia. Días antes de ese incidente se enfrentó al preparador físico Gustavo Chaverra y faltó en dos oportunidades a los entrenamientos.
“No cumple con los requisitos de disciplina de la institución que represento y que tengo que hacerla valer por encima de cualquier cosa”, dijo el entonces técnico del DIM Pedro Sarmiento sobre Pino.
Recién 8 meses después fue fichado en Bastia, otro largo periodo de tiempo sin fútbol en los últimos 4 años.
Desde el 2012 pasó por Olympiakos, Independiente de Medellín y SC Bastia. Solo disputó 21 partidos (7 de titular) y sumó a penas un gol en todo ese tiempo. Desde hace cuatro meses se está poniendo a punto con el preparador físico Erick Herrera. Hoy fue fichado por Universitario y llega el viernes.
Indisciplina presente
Se esperó que triunfe en el AS Mónaco de Francia tras ser considerado como la promesa del fútbol colombiano en sus inicios en Independiente de Medellín (2005-2007). No lo logró. Diversos acontecimientos relacionados a faltas a los entrenamientos y mal estado físico lo marginaron de los principales equipos europeos. Sporting Charleroi, Galatasaray y Al Nassr fueron otros clubes por los que pasó el colombiano. Una constante fue el rumor de su apego por el alcohol, rebeldía y falta de adaptación.
“Tenía unos negocios en Cartagena que estaban tomando malos caminos y decidí ponerme al frente de eso. Ya solucioné eso y ahora estoy más tranquilo. Me estoy enfocando nuevamente en lo que me gusta hacer, que es jugar al fútbol”, explicó Juan Pablo Pino sobre su alejamiento del fútbol.
El periodista Iván Mejía de la multiplataforma periodística Caracol de Colombia dijo en el 2015 sobre Pino: “No lo reciben ni en el equipo de los ‘chupadores’”.
Para el columnista deportivo colombiano José Pablo Señudo el atacante Juan Pablo Pino “deslumbró en un sudamericano (2007), talento de talentos en su momento pretendido por los equipos más grandes, hoy ni se sabe de él, está perdido para el fútbol”.
El portal colombiano Fútbol Red consideró a Pinto en el Top 7 de ““Algunas promesas a las que la indisciplina no los dejó triunfar”“:https://www.futbolred.com/otras-ligas-de-futbol/top-7-algunas-promesas-a-las-que-la-indisciplina-no-los-dejo-triunfar+15532636, en esta lista aparece el jugador de Alianza Lima Johnnier Montaño.
¿La última oportunidad en el fútbol?
“Me dejaba deslumbrar por otras cosas, ahora no pasa eso, encontré una estabilidad emocional con mi familia, estoy tranquilo y quiero enfocarme en jugar cinco o seis años más y terminar bien mi carrera”, reflexionó Juan Pablo Pino antes de su llegada a Universitario.
La promesa del fútbol mundial llega al Perú con la intención de reinventarse en el terreno de juego. Sueña, cree y tiene fe.
“Juan Pablo Pino va tras una nueva meta. Su fútbol aún tiene magia, mucha magia”, sentenció el atacante colombiano.
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