Por: Fernando ‘Vocha’ Dávila / José ‘Huachano’ Lara
Eran otros tiempos. Por esos años, el programa más visto en nuestro país era ‘Trampolín a la fama’, la genial ‘Chabuca’ Granda había ganado el Festival OTI, ‘Vale el saber’ tenía cautivados a todos y la selección había clasificado al Mundial de Argentina 78. El fútbol paralizaba a la patria y Juan Carlos Oblitas era el jugador que provocaba aplausos en los hombres y suspiros en las mujeres. Era una de las ‘estrellas’ y hoy, pese a que han pasado cuatro décadas, sigue siendo el ‘Ciego’, del que todos hablan y comentan.
Amas de casa, chicas maduras y algunas abuelitas vieron la repetición del Perú vs. Escocia en Argentina 78 y coinciden en que tenías las mejores extremidades inferiores de nuestro fútbol...
Por allí enamoré a mi mujer.
¿Tus nietas qué te comentaron?
Me dijeron: ‘Papi, las tenías lindas’.
¿Mucho gimnasio?
Naturales por familia de parte de mi mamá, aparte que jugué siempre en la playa y mi tierra, Mollendo, es de subidas y bajadas.
¿Todo el día caminabas?
Iba y venía a pie del colegio.
¿Cuánto tiempo duraban esas caminatas?
Casi treinta minutos y en ese tiempo se estudiaba mañana y tarde.
Mi hermana es tu hincha, ¿le puedo decir que siguen intactas?
Ya no, la edad jode.
¿Te da miedo envejecer?
Para nada. Tenemos que ser inteligentes y dignos para hacerlo.
¿Qué te recomiendan?
Que me tiña el cabello y respondo: ‘Si lo hago, me convierto en esclavo del tinte’.
Pero los años vienen con problemitas...
Las arrugas y achaques los vas a tener.
¿Y tú cómo estás?
Agradezco a Dios que estoy muy bien.
¿Haces ejercicios?
Bicicleta estática.
¿Nada más?
Salía a caminar, pero por una hernia prefiero hacerlo en casa.
¿Fuiste el Claudio Pizarro de tus tiempos?
La gran diferencia es la televisión.
¿Por qué lo dices?
En mis tiempos solo se transmitían los partidos y allí acababa todo.
Es verdad...
Ahora se difunde mucho más la vida del jugador.
Además están las redes...
Ahora un jugador sale con el tema del ‘TikTok’ y esas cojudeces.
Hay más exposición.
Hay jugadores que piden: ‘No se metan en mi vida privada’, pero si todos los días salen con: ‘Estoy comiendo tal plato, estoy yendo al baño...’.
¿Tus nietos te han ‘obligado’ a hacer el famoso ‘TikTok’?
Claro que lo hago con ellos y mi esposa, pero eso queda en la interna.
¿Lo publicarías?
Mi grado del ridículo no llega a tanto.
¿Has visto a Jorge Benavides imitándote en ‘El wasap de JB’?
Me divierto muchísimo.
¿En serio?
Quien más disfruta es mi esposa, llora de risa. Ella me avisa cuando comienza y hasta se burla de mí.
¿Lo hace bien?
Es tan bueno que hasta hace que me caiga mal el ‘Cholo terco’.
Se ve que tienes ‘correa’...
Si eres personaje público y no tienes ‘cancha’ para burlarte de ti mismo, mejor dedícate a otra cosa.
¿Fuiste el más arreglado de tu generación?
Es que eran puros feos.
Dejar dos años de estudios de Medicina por el fútbol debió costar mucho...
Mi papá no quería y le dije: ‘Tranquilo, voy a ser de los mejores futbolistas’.
La pelotita siempre atrae mujeres bellas y la tentación, a veces, es insuperable...
Me casé joven y siempre me dije: ‘O escojo la felicidad de mi matrimonio o me vuelvo loco’.
Obviamente apostaste por lo primero.
Siempre preferí el cariño de mi esposa y mis hijos.
¿Cómo se hace para escapar de tremendas tentaciones?
Aplicando la inteligencia emocional.
Desarrolla el concepto...
Solamente hay que elegir una vida tranquila y si no quieres eso, no te cases.
Te vi marcar goles importantes y al festejar pedías que no te abracen...
Es que un par de veces en Bélgica, por el abrazo, me sacaron los lentes de contacto.
¿Por eso los frenabas?
Agachaba la cabeza y me daban palmaditas en la nuca.
El gran Óscar Arizaga, tu compañero en España 82, me comentó que una vez te sacó tus lentes y los tiró al campo...
Negrito sinvergüenza. Muy machito, cuando le tocaba marcarme se iba para atrás.
¿En serio?
Él y Augusto Prado te daban con todo, pero nunca con mala intención.
Volvamos al partido ante Escocia. ¿Tu mejor actuación con la ‘Bicolor’?
Tuve otros buenos encuentros, en ese duelo la presencia de Juan José Muñante me ayudó mucho.
¿Por qué?
Todos sabían de él, en esos tiempos era el mejor puntero derecho del mundo y se concentraron en marcarlo.
¿Viste los 90 minutos?
No. Me da un poco de nostalgia, además todos entran en comparaciones con los seleccionados de hoy y eso no está bien.
Y sigue la ‘chamba’ en la Federación...
Mientras tenga estas fuerzas, seguiré. Sé que estoy aportando y disfruto de lo que hago.
Gracias por esta nueva entrevista...
A ustedes. Ya saben, cuídense mucho y no jodan tanto, ja, ja, ja.