Atlético Madrid buscaba con desesperación el gol del empate ante Athletic Club de Bilbao, en la semifinal de la Supercopa de España, en el último minuto y Diego Simeone envió a sus defensas centrales al área rival. El uruguayo José María Giménez llegó con la intención de anotar, pero terminó siendo protagonista de una dura falta contra Íñigo Martínez.
La desesperación se había adueñado del plantel ‘Colchonero’, luego de la remontada que sufrieron, con los goles de Yeray Álvarez (77′) y Nico Williams (81′). Sin embargo, a pesar del poco tiempo que restaba, no bajaron los brazos y salieron con agresividad a buscar la igualdad, para provocar la prórroga.
Debido a ello, Diego ‘Cholo’ Simeone ordenó que los jugadores más altos vayan al área contraria, con el objetivo de aprovechar algún balón aéreo. De esa forma, José María Giménez y Renan Lodi aparecieron frente a la portería protegida por el guardameta Unai Simón, a la espera de algún centro preciso.
Finalmente, sobre los 93′, el mexicano Héctor Herrera encontró espacios cerca a la media luna y mandó el esférico hacia el punto penal. La habilitación no fue muy buena y Giménez se vio obligado a realizar una maniobra peligrosa para rematar al arco: saltó y elevó la pierna derecha, como si fuera a realizar una patada de karate.
No obstante, el defensa uruguayo llegó tarde y terminó impactado la planta de su botín contra el rostro de Íñigo Martínez, quien había despejado la pelota. El árbitro Guillermo Cuadra Fernández observó la escena e inicialmente sancionó con tarjeta amarilla, pero recibió un llamado desde el VAR y, tras el análisis, el zaguero fue expulsado.