La Selección Peruana atraviesa un momento clave en su intento por reconstruirse tras un ciclo de altibajos. Sin embargo, las malas noticias no se detienen. De acuerdo con las últimas proyecciones, el nuevo ranking FIFA traerá otra revés para la Blanquirroja, luego de la dura derrota por 2-1 frente a Chile en Santiago.
Antes del arranque de la reciente fecha FIFA, el combinado nacional se ubicaba en el puesto 48 del ranking mundial, producto de una Eliminatoria Sudamericana para el olvido, en la que Perú quedó fuera del Mundial 2026 incluso sin llegar al repechaje. Esa caída de seis posiciones reflejó un bajón sostenido en el rendimiento colectivo, que no ha logrado revertirse pese a la llegada de nuevos nombres y la búsqueda de un estilo más moderno de juego.
Ahora, según los cálculos previos a la nueva actualización, Perú descenderá al puesto 49, firmando uno de sus registros más bajos en la última década. Este nuevo retroceso evidencia que el equipo todavía se encuentra lejos de la élite futbolística y que el trabajo de reconstrucción recién empieza. En ese proceso, figuras como Jean Ferrari y Manuel Barreto asumen un rol protagónico dentro de la FPF, intentando reordenar la estructura deportiva con miras al siguiente proceso clasificatorio.
De cara al futuro inmediato, la Selección Peruana tiene por delante dos amistosos internacionales en noviembre frente a Rusia y Chile, ambos en territorio europeo. Estos encuentros se presentan como una oportunidad clave para que Barreto siga probando nuevas piezas y consolidando la identidad que busca imponer en el equipo. Además, serán determinantes para sumar puntos en el ranking y, sobre todo, recuperar la confianza perdida.
Si bien el ranking FIFA no siempre refleja el verdadero potencial de una selección, sí sirve como termómetro del rendimiento competitivo. Por ello, Perú necesita resultados positivos que devuelvan ilusión a la hinchada y fortalezcan el proyecto deportivo. Ganar estos amistosos podría ser el primer paso para salir del puesto 49 y reencontrarse con una versión más competitiva de la Blanquirroja.
En medio de este panorama, surge una noticia alentadora: el técnico argentino Gustavo Álvarez, actual entrenador de Universidad de Chile, sería el principal candidato para tomar las riendas del combinado nacional. Según información del diario chileno El Mercurio, la FPF estaría dispuesta a pagar la cláusula de salida de 1.2 millones de dólares que lo separa del club azul. Aunque el propio Álvarez ha evitado confirmar su salida, su llegada podría marcar el inicio de una nueva etapa en la selección, con la esperanza de que Perú recupere su identidad y vuelva a pelear en la élite del fútbol sudamericano
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