TIENE SUS RAZONES. Paolo Guerrero sorprendió al revelar que no quiere que su única hija mujer juegue fútbol. El ‘Depredador’ explicó que le preocupa que su hija tenga las rodillas con heridas o sea afectada durante un partido, ya que el fútbol es un deporte de contacto.
En ese sentido, el mismo Paolo Guerrero se puso de ejemplo y remarcó que no desea que su pequeña tenga que terminar con las piernas marcadas.
“Naela decía que jugaba bien el fútbol, pero no quiero que ella esté arañada, me preocupa muchísimo, pero al final ella decidirá qué hacer y yo la apoyaré”, precisó en entrevista en La Lengua.
Al hablar sobre sus hijos que están en Alemania, Paolo Guerrero dijo que a pesar de estar lejos trata de estar presente para ellos.
“No dejo de lado los otros porque también forman parte de mi vida, y son el mayor amor uno puede tener. Tengo que tener contacto con los demás, los tengo un poco lejos… Siempre trato de estar pendiente y en contacto con ellos, también necesitan de mí”, indicó.
No obstante, explicó que sus hijos mayores no juegan fútbol y eso aunque lo pone triste, apoya todo lo que les gusta.
“Diego (el mayor) no le gusta el fútbol; Alessio juega bien, lo he ido a ver y es rápido, pero no es su pasión el fútbol. Tampoco trato de exigirle que sea futbolista, le gusta el snowboard y la bicicleta”, sostuvo.
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