Su estilo es directo y sin medias tintas. Dice las cosas con educación, pero sin buscar la palabra que maquille lo que desea dar a conocer. Juan Carrillo, al que el imaginario popular lo ‘bautizo’ como ‘Drogba’, fue un futbolista profesional que defendió los colores del Sport Boys, Sport Áncash y otros clubes del ande peruano.
Mira también:
Fue reconocido en el fútbol nacional y hoy, como muchos que dejaron la actividad profesional, se ha reinventado. Es árbitro de campeonatos de fulbito, pero eso no impide que levante la voz, exigiendo derechos que no son importantes para él sino para las nuevas generaciones que practican el deporte más querido del mundo.
Juan, ¿la Agremiación de futbolistas te defraudó?
Siento que he sido usado.
¿A qué te refieres?
Durante años, como futbolista profesional, daba mis aportes.
¿Entonces?
La plata que nos descontaban se fue como agua entre mis dedos.
¿Por qué lo dices?
Entregábamos nuestros aportes mes por mes, pero cuando llegó la hora del retiro, no vimos toda esa plata que fuimos dejando cada treinta días.
¿Te has acercado a sus oficinas?
A mí me dio el COVID, no tenía para comer y cuando pude recuperarme algo, dar unos pasos, fui hasta las oficinas de estos señores.
¿Pediste apoyo?
Sí y recibí como respuesta: ‘La Agremiación no está para ayudar’
¿Qué respondiste?
Les aclaré: ‘Me muero y no les importa nada. Aunque sea deposítenme mil soles para llevar a mi casa, de todo lo que aporté y la deuda que tienen por cobrar de los clubes donde jugué’.
¿Regresaste a tu hogar con las manos vacías?
Sí y se jactan que se preocupan, pero la realidad es que lo único que les importa es el jugador que está en actividad.
¿Y los que ya están retirados?
Ven por sus cosas y ellos no apoyan.
¿Y lo ahorrado durante años?
Se quedó ahí. Mientras buscamos como sobrevivir, a ellos, los dirigentes de la Agremiación, los veo en autos del año, con su familia en Europa, presentes en torneos mundiales de tenis.
¿Qué sería lo correcto?
Ellos deberían darle unos dos mil dólares a los que nos retiramos para poner un negocio. Dimos tantos aportes, que no es justo que nos retiremos y ese dinero no lo veamos más.
O sea, no hay un sueldo, así sea mínimo, una vez que el aportante se retira
‘Mueres’ como futbolista y ya no ves tu plata.
¿Conclusión?
La Agremiación es como una AFP nefasta, un cáncer que hay que extirpar.
Se te van a venir encima los dirigentes
Muchos piensan como yo, pero no lo quieren decir.
Te siento lleno de bronca
Cuando se creó, decían que iban a cambiar el fútbol, a cuidar los intereses de los jugadores, ¿pero hacen algo de eso?
¿Por eso te reinventaste y ahora eres árbitro?
Y me arriesgo porque dirijo en campeonatos de barrio, donde la gente se apasiona y puede perder el control. Ahora estoy ‘entero’ físicamente, ¿pero si un día me enfermo?
Hablaste fuerte y claro
Siempre hablamos con sinceridad, riendo, pero cuando hay que decir las cosas, te saco todo el ‘pizarrón’. No soy bruto.
Muchas gracias
Estoy pensando en los jóvenes que dejan su dinero cada mes, descontado de manera obligatoria de su sueldo. Cuando les toque retirarse, ¿qué reciben de un ente que dice defenderlos?
Un gran abrazo
A ustedes por venir hasta mi casa y escucharme.
