
En los años 80, vistiendo los colores de Universitario de Deportes, un trujillano llegó hasta el estadio ‘Lolo Fernández’ buscando cumplir un sueño. Eduardo Aguilar tuvo que demostrar en un partido de entrenamiento, marcando a los más pintados delanteros cremas de la época, que estaba hecho para jugar en la primera división del fútbol peruano y vistiendo los colores de uno de los clubes más populares del país.
Eduardo, ¿Cuántos apodos tienes?
Tengo 3: Me llamaron ‘Bam Bam’ por mi 1,80 cm de estatura, mi espalda ancha y todo lo demás.
¿Las otras ‘chapas’?
Tenía 18 años y mis compañeros era mucho mayores que yo y por tal razón a todos los llamaba tío. Me ‘bautizaron’ como ‘Sobrino’.
¿Y la última cuál fue?
Los periodistas me llamaron el ‘Candado’ porque daba seguridad a la defensa crema.

¿Quién fue tu primer compañero de concentración?
El gran capitán Fernando Cuellar.
¿Cómo te trataba?
Me llenó de consejos y me daba su confianza. En su auto aprendí a manejar.
¿Ya eras hincha de la ‘U’?
Simpatizaba con Cristal, pero jugar en Universitario, ver a su hinchada, entrar al estadio y escuchar el canto, hace que te enamores de esta camiseta.
Hablaste del carro, ¿te lo compraste con tu primer sueldo?
Yo me preocupaba en tener casa y el auto lo adquirí después de salir campeón en 1982.
Tienes el récord de haber marcado a los mejores de tu época
En 1980 jugamos un cuadrangular en ‘Matute’ ante Alianza Lima, el Strickers de Estados Unidos, donde jugaba el alemán Gerd Müller.
¡Goleador de mundiales!
No hablaba, era fuerte, no podía descuidarme. Además mi técnico, don Roberto Scarone, fue claro.
¿Qué te dijo?
Si lo anulas 89’ y hace gol en el minuto 90, de nada sirve tu esfuerzo. Por eso me pegué a él todo el partido.
El 1981 enfrentaste a River Plate que llegó con Mario Kempes, goleador del Mundial que ganó Argentina
Otro lujo que me dio el fútbol. Era muy difícil y no te hablaba, solo jugaba.
¿A qué otro anulaste?
En un torneo juvenil, de Uruguay, me tocó enfrentar a Diego Maradona. Lo fui a buscar y darle con todo, pero giró de manera impensada y solito me lesioné.
Tuviste de compañero a Roberto Chale.
Un genio. En ese tiempo yo daba buenos pases largos, la prensa me elogiaba por eso y un día, lo hice y Roberto me paró.
¿Qué te dijo?
No hagas eso, para eso estoy yo, dame la pelota.
¿Qué siguió?
Cuando me retiré, me dediqué a buscar nuevos valores y abrir una academia de fútbol y fundé un club.
¿Qué más?
Con mi socio Miguel Chamochumbi, que también ha jugado fútbol, hicimos un proyecto y logramos ganar la concesión del estadio Unión de Barranco.

¿Quién se las dio?
La Municipalidad del distrito licitó pidiendo una inversión de más de 7 millones de soles y nosotros la ganamos con más de 11 millones.
¿Qué encontraron?
Un terral que no tenía baño, ni agua, tampoco luz. Era la perrera municipal y estaba el serenazgo.
Continúa
Limpiamos todo, reubicamos a los serenos, con el 90 por ciento ya avanzado, hubo cambio de alcaldía.
Perdón, ¿de qué año estamos hablando?
El 2017 ganamos y el 2019 el nuevo burgomaestre, nos quita la licencia de construcción.
¿Entonces?
Fuimos al arbitraje correspondiente y ganamos en todos los niveles. La autoridad pidió un laudo arbitral y otra vez nos dieron la razón. Con el Poder Judicial sucedió igual.
¿Y por qué no sigue con la obra?
Jessica Vargas, actual alcaldesa del distrito, nombró una comisión investigadora y nunca han ido a revisar la obra.
¿Qué desean?
Se nos permite culminar los trabajos, que serán para beneficio del distrito. Nosotros ofrecemos dos canchas de fútbol, un polideportivo, vestuarios y luces de primer nivel, que la Liga juegue gratis, pero prefieren que se vayan a jugar a Chorrillos, donde pagan alquiler por el campo que utilizan.
¿Algo más?
Ofrecemos a los colegios barranquinos, que no tengan espacio para hacer educación física, que vengan entre 9 y 3 pm y no se les cobrará nada.
Gracias por la confianza
Un abrazo a todos y esperamos que se solucione todo por el bien del distrito.










