Mi gente maravillosa de ‘La fe de Cuto’, estoy muy feliz por cada uno de mis seguidores del programa que me apoyan siguiéndome en todo lo que hago día a día. ¿Ya se devoraron el primer capítulo de la entrevista a Gisela Valcárcel? Ahora viene la segunda parte que está más picante que vena de ají rocoto. No sé lo pierdan.
Ahora les voy a contar sobre mi viaje a Europa junto a mi productor José Lara, conocido como ‘El huachano’, y toda nuestras aventuras por Alemania y España. Por favor, no quiero que se entienda mal. Mejor dicho, no quiero que suene o piensen que estoy hablando con soberbia, nada de eso. Sinceramente tenemos muchas historias vividas y mucho aguadito, pero ahora les voy a contar sobre lo que me tocó vivir el último martes previa al partido amistoso Perú vs Marruecos.
Durante nuestra llegada a Madrid, el domingo 26 de marzo, noté una clara diferencia con la cantidad de peruanos por estos lares. No estoy diciendo que en Alemania no había peruanos, pero en la ‘Madre Patria’, desde que llegamos al aeropuerto y tomamos el tren que nos llevó al centro de la ciudad capital de España, sentí esa diferencia. En el transbordo de un tren y la conexión con otro, un peruano de a pie me quedó mirando fijamente con una cara evidente de sorprendido. Segundos después, atinó a decirme: “tú eres Cuto, por favor, me puedo tomar una foto contigo”. Ese era el tipo de diálogo que mantenía con cada uno de los peruanos que se iban felices con una foto y otros, con un vídeo de saludo para un familiar.
Una vez que bajamos del Metropolitano y hacía mi aparición por la Gran Vía, zona céntrica de Madrid, ya la cosa fue más fuerte. “Mira, ese es Cuto”, “Cuto, qué haces por acá”, “Ese es Cuto”, “Cuto, una foto”, " ¿Tú eres Cuto?”, fueron las frases más comunes que escuchaba a mis compatriotas que, al ver mi sonrisa, iban confirmando que era el verdadero y se tomaban la foto mientras seguía mi camino rumbo a mi alojamiento.
Y ese ritmo se repitió durante toda mi estancia en la ciudad. Tanto en la visita al estadio Santiago Barnabéu, a los restaurantes, a los centros comerciales como por los lugares que caminaba, siempre me encontraba con un peruano que, modestia aparte, creo que se alegraba la vida. No es para menos, los que en algún momento hemos estado lejos de los nuestros o lejos de tu país, por un buen tiempo, sabe de lo que le hablo. Yo sinceramente me siento feliz de tomarme una foto con cada uno de ellos y siento tanto en sus palabras como en sus miradas que les recuerdo algo de nuestro Perú. Y eso me hace muy feliz. Solo me queda agradecer tanto cariño genuino de todos.
Y llegó el día del partido amistoso Perú vs. Marruecos. Junto con mi productor ‘El huachano’, Martín Cassana, hombre de prensa que ya radica hace más de un año por estas tierras; Erick y Martín Gutarra, peruanos que radican en Suecia y que manejaron por todo Europa para ver los dos partidos amistosos; y mi hermano de la vida Carlos Reyna que desde Bélgica llegó hasta Madrid para ver a la ‘Bicolor’, nos trasladamos al Cívitas Metropolitano, el moderno estadio del Atlético de Madrid que está ubicado a las afueras de la ciudad madrileña y muy cerca al aeropuerto Barajas. Era impresionante.
Fue mi primera vez en un estadio así, como mi primera vez en esta ciudad. Camino al estadio se formó un tráfico terrible y tuvimos que dejar el carro viajero cerca al estadio para llegar caminando al escenario. Luego llegó la locura total de los hinchas peruanos quienes al verme me pedían una foto sin imaginar que, a cada minuto, se irían sumando más y más.
Eran cientos de hinchas y todo se comenzó a desbordar, sentí miedo y temor de que algo malo suceda. Traté de tomarme las fotos con la mayor cantidad de peruanos hasta que ya no pude más. Fue una locura. En ese momento tuve que aplicar la velocidad de Forrest Gump para correr y poder liberarme de tantos hinchas. Adelante de mí estaba ‘El huachano’, buscando la puerta que nos correspondía para nuestro ingreso, mientras que Martín Cassana me apoyaba para seguir avanzando.
Tanto fue el alboroto que mi productor pidió ayuda a la policía montada para que nos auxiliara por un momento, poder tomar aire y seguir nuestra ruta. Así fue, luego de unos minutos, volvimos a correr hasta llegar a la bendita puerta W3 para ser auxiliados. Gracias a la gestión de José Lara, la encargada de prensa nos hizo pasar y nos puso a buen recaudo.
Quizás muchos no lo entiendan y otros piensen que soy un posero, pero no es así. Tampoco me estoy botando ‘cómo agua sucia’, nada que ver. Al contrario les pido un millón de disculpas a cientos de peruanos que no he podido cumplir con las fotos de recuerdo que me pedían, tuve que correr por mi seguridad y la de todos ustedes. La policía española se preguntaba: “Quién es este chaval, por qué tanto gente busca por una foto”. Soy humildemente ‘Cuto’ Guadalupe, un hombre del pueblo peruano.
Cuando estaba más tranquilo, tras correr, se acercó una cámara y me dijo: ‘Somos del canal de Youtube Mundo Maldini y quiero que nos mandes un saludo’. Así fue. Hoy temprano un amigo me envía el enlace y me dice ‘Cuto’ ahora eres más famoso ya que saliste en el programa Mundo Maldini. Increíble. Veo las imágenes y me doy cuenta que ellos logran grabarme al final luego que ya había corrido más de 1 kilómetro.
Acá les dejó el enlace para que vean algo de lo que les conté. El Huachano no pudo grabar ni tomar fotos ya que estaba muy preocupado por la situación y trataba de sacarme de esa situación.
A mis compatriotas, una vez más, mil disculpas y estoy seguro que ya habrá oportunidad de tomarnos unas fotos. Se los prometo. Nos leemos en nuestra próxima entrega.
Contenido GEC