De un momento a otro ya estaba jugando con las Leyendas del fútbol mundial en Miami, en un partido que organizó la Conmebol. ¡Qué pedazos de jugadores que habían convocado! Eran unos ‘monstruos’ mundiales. Oscar Ruggeri, Javier ‘Pupi’ Zanetti, Iván Zamorano, Marcelo Salas, ‘Maxi’ Rodríguez, Javier ‘Conejo’ Saviola, El ‘Toro’ Acuña, Jorge ‘Burru’ Burruchaga, ‘Chicho’ Serna, Iván Ramiro Córdoba, Mario Yepes, Gustavo Barros Schelotto, Mauro Silva, Claudio Paul Caniggia, Diego Lugano, Clarence Acuña, Christian Bassedas y Marco ‘El Diablo’ Echeverry.
A mi lado, ellos son figuras de otro planeta. Como diría mi sobrino Jefferson Farfán y Roberto Guizasola, ellos son satelitales de otra galaxia. Pero ahí estaba ‘Cuto’ Guadalupe -humildemente- representando al Perú, izando la bandera para alegría de muchos y envidia de otros tantos. Así son las cosas. Así es mi Perú. Entiendo a la gente, cuando se pregunta. ¿Qué hace Cuto ahí? O cuando son más hirientes y dicen cosas más subidas de tono.
‘Cuto’ sobre su partido de Conmebol
Pero para los incrédulos o soberbios, para los hombres de poca fe, yo le dije al bravo: “Dios, yo voy a dónde tú me lleves”. Esa es obra de Dios. No hay otra explicación, no busquen más. Esa es la razón por la que aparecí jugando con esas figuras del fútbol mundial. Yo me sentía un hincha más ante tamañas estrellas.
Pero yo camino con mi fe en Dios, estaba ahí junto con esas figuras de talla mundial y dando lo mejor de mí, como siempre lo he hecho. Digo que es obra de Dios, porque él obra en otras personas para que todo se cumpla. Efectivamente, mi viaje a Miami para estar presente en el partido de Leyendas de la Conmebol se dio a última hora. Mi amigo Pablo Castro me escribió para darme la posibilidad de viajar y poder estar presente. Y así apareció Miguel Moreno de Agromoro para que todo se concrete de un momento a otro, todo fluyera y de la noche a la mañana, junto con mi productor y manager José ‘Huachano’ Lara, estar en un avión rumbo a Miami. Obra de Dios, no tengo duda. Allá los incrédulos.
Volviendo al partido, el presidente de la Conmebol Alejandro Domínguez dio inicio al encuentro y si bien no arrancó de titular, yo tampoco, por esas cosas de Dios, en un momento del partido estuvimos frente a frente, en una pelota parada me marcó más de lo que fue Reyna a Maradona (ver foto). Fue una cosa de loco. Se había tomado en serio el partido. Eso está bien. En la siguiente jugada, por esas circunstancias del juego, quedé en una situación con la pelota que solo tenía la opción de hacerle un túnel, lo que criollamente en Perú le decimos una huacha, y la jugada termina en un gol del Toro Acuña. Al presidente de la Conmebol le había hecho la jugada ‘La de Ronaldinho’.
‘Cuto’ sobre su partido de Conmebol
Finalmente, el partido lo terminamos perdiendo por 10 a 9. La pasamos muy bien. Todo en un ambiente de confraternidad.
Ni bien acabó el partido me acerqué a Alejandro Domínguez para pedirle las disculpas del caso, él como hombre de fútbol, tenía claro que esa jugada es parte del fútbol.
Pero, obviamente, no tardó mucho en llegar las bromas. El primero que me puso al centro fue ‘El Cabezón’ Ruggeri. “Guadalupe, cómo se te ocurre hacerle un túnel al presidente. Eso es debut y despedida. Ya no vuelves más”. Y así fueron las bromas, una tras otra. Las bromas del ‘Toro’ Acuña, Mauro Silva y otros.
Luego en el bus de regreso al hotel, Mauro Silva, un gran ser humano, un amigo más que Dios me da, me dice la jugada del túnel al presidente ya está en las redes sociales. Nos la muestra y el ‘Huachano’ José Lara, en una, se da cuenta que lo había publicado ESPN de Brasil.
Efectivamente, no pasaría mucho tiempo más para que aquella jugada del partido Leyendas se vuelva viral en las redes sociales. Mi WhatsApp luego acabó inundado de mensajes sobre la jugada.
Luego, la noche del sábado, compartí la cena con todas esas leyendas y las bromas siguieron una tras otra. El campeón del Mundo Oscar Ruggeri, es un gran personaje, la pasé de maravilla, con cada broma, con cada anécdota, con toda la charla. Sinceramente voy a tener presente cada instante compartido con cada uno de ellos, pero Ruggeri está en mi top como un hombre de fútbol, de bromas, divertido, ameno. Quiero estar siempre en su cuadro. Nos leemos el próximo lunes.
