Thiago Silva, zaguero de Chelsea FC y referente de la selección de Brasil, ha sorprendido al mundo del fútbol al confesar que su carrera estuvo en riesgo por un enfermedad bacteriana que puso en peligro su vida cando recien empezaba su camino en Europa.
El brasileño contó que su carrera pudo verse frustrada tras su primer paso por el ‘Viejo continente’. El defensor había sido comprado por Dynamo de Moscú al Porto FC pero no pudo mostrar todo su talento en rusia debido a una microbacteria (Mycobacterium tuberculosis) que se instaló en sus pulmones.
“Me mudé al Dynamo de Moscú en Rusia cedido por el Oporto y durante la pretemporada, de repente comencé a sentirme muy mal. Me hicieron algunas pruebas y se confirmó que tenía tuberculosis y que ya estaba muy avanzada”, reveló el zaguero de 38 años al canal oficial de Chelsea.
El diagnóstico vino acompañado de preocupantes noticias como una complicada cirugía. “Por lo avanzado que estaba la enfermedad, los médicos decidieron que sería mejor que me quedara en el hospital para recibir tratamiento. En Rusia querían operarme el pulmón. Si lo hacía, sabía que no volvería a jugar al fútbol”, relató.
Milagrosamente el agresivo tratamiento para la tuberculosis de los médicos rusos recuperó a Thiago Silva, sin embargo, le recomendaron que se recupere en Portugal. “Mi abogado logró desligarme del Dynamo y pude terminar mi tratamiento en Portugal. Estuve tres meses más allí. Tomando medicamentos todos los días y haciendo caminatas diarias. Fue una espera larga. Al final el especialista me dijo que me estuviera tranquilo”, recordó con alivio.
Superada esta prueba el Thiago Silva encontró la fortaleza para encarar con mucha más pasión los retos personales. “Cuando pasas momento así en tu vida, sabes que saldrás victorioso. No solo por cumplir tu sueño, tu destino de jugar al fútbol, sino también por ganar todos los títulos que anhelabas y soñabas”, concluyó.
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