Es difícil borrar del recuerdo de muchos el apasionado beso que estampara Iker Casillas a Sara Carbonero, minutos después que la selección de España lograra levantar la Copa del Mundo en Sudáfrica 2010. Esa muestra de amor hizo oficial lo que ya era un rumor en los estadios y que ha durado diez años de alegrías y turbulencias que han sido difícil de superar.
La historia entre Iker Casillas y Sara Carbonero empezó un año antes del famoso beso. Corría el año 2009, cuando la periodista se convirtió en el fichaje de Telecinco para la cobertura de la Copa Confederaciones que España disputaba ese año en Sudáfrica, allí conoció al guardameta.
La relación siempre fue cuestionada desde el principio. En ese tiempo. “Hablaban por teléfono a menudo, por temas de trabajo, pero Sara no estaba muy por la labor. Ya sabes la fama que tienen los futbolistas en general”, reveló Susana Guasch amiga de la periodista a Vanity Fair.
Iker Casillas no encontraba respuesta positiva de la periodista hasta que hizo su gran ‘jugada’ en el cumpleaños de Sara Carbonero, un 3 de febrero. “Iker me llamó para darle una sorpresa a Sara por su cumple. Quería demostrar que le interesaba de verdad”, dijo Nira Juanco amiga de reportera.
Esa noche, Sara y sus amigas fueron al teatro y después salieron a cenar. “Allí apareció él a las 12 de la noche en el restaurante, con regalo incluido. Ella se quedó petrificada. A partir de ahí la relación ya fue imparable”, contó la amiga.
Luego llegó el Mundial Sudáfrica 2010 y los rumores incansables sobre su relación y la distracción que suponía en esta competencia. España superó a todos sus rivales y tras levantar la Copa del Mundo, en la zona mixta Iker Casillas no aguantó las ganas de besar a su novia delante de las cámaras.
Cuatro años después llegaría el primer hijo de la pareja, Martín. Iker y Sara seguían superando los baches en su relación. Tras su mal momento en Real Madrid el golero decidió aceptar la oferta de Porto FC. “Mi mujer y mi hijo día a día estarán a mi lado compartiendo cada segundo de esta emocionante etapa de mi vida”, dijo el guardameta durante su despedida en el Santiago Bernabéu.
El 20 de marzo de 2016 la pareja decidido caminar hacia el altar. “Fue un momento muy muy bonito. Yo lo disfruté mucho, es de esos días que quedan para siempre en el recuerdo”, declaró Sara Carbonero, quien tres meses después daría a luz a Lucas, su segundo hijo.
Después de tres años de paz en Porto, llegaron verdaderos problemas que sacudieron la estabilidad del matrimonio. “Todo controlado por aquí, un susto grande, pero con las fuerzas intactas. Muchísimas gracias a todos por los mensajes y el cariño”, dijo el guardameta tras sufrir un infarto que aceleraría el retiro del futbol profesional.
Los problemas no terminarían, pues a las pocas semanas Sara Carbonero era sometida a una cirugía por un cáncer de ovario detectado en una revisión rutinaria. Luego empezaría un tratamiento agresivo contra el cáncer al que logró vencer.
Con su vuelta a España, todo parecía indicar regresar al orden natural. Iker Casillas aceptaba una oferta de Real Madrid, como adjunto al director general de su fundación y Sara Carbonero era fichada por Radio Marca, pero la ausencia del campeón del mundo en el funeral del abuelo de la periodista y su mea culpa al no estar al lado de su esposa en momentos claves daban cuenta que el final estaba cerca.
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