El delantero español del Real Madrid, Álvaro Morata, cumplió el sueño de un niño de nombre Alex, quien es su seguidor número 1.
Morata hizo ingresar al infante a la concentración del Real Madrid, en el Parque de Valdebebas y le autografió dos camisetas.
Al verlo afuera del local de los entrenamientos, Morata hizo subir a su moderno Porsche al menor
Minutos después se vio salir feliz, al pequeño con una camiseta de Juventus y otra del Real Madrid, ambas firmadas por Morata.
Muy emocionado el niño confesó que no jugará fútbol con esas camisetas, sino las guardará como 'un tesoro'.