TODO LO QUE SUBE TIENE QUE BAJAR. La última lesión que acaba de sufrir el volante Eden Hazard dejó algo claro: sus mejores tiempos parece que ya pasaron. A los 30 años y con un pésimo presente en Real Madrid, el valor del mediocampista ofensivo se ha ‘ido a pique’. Esto va en contra del cuadro merengue que habría decidido ponerlo en el mercado, pero que sabe ahora que no recuperará la inversión que hizo hace casi dos años y con la que pensó que fichaba al reemplazante de Cristiano Ronaldo.
Fue en junio del 2019 cuando Eden Hazard llegó al Real Madrid. En un principio se dijo que el equipo español había pagado 100 millones de euros por el pase del belga al Chelsea, sin embargo luego se reveló que el verdadero precio había sido de 160 millones de euros.
Justamente, ese fue el precio más alto que alcanzó Hazard para el portal Transfermarkt. El ‘pico’ más alto se dio en su estancia en el Chelsea y en el momento de su pase al Real Madrid. Hazard era figura en los ‘blues’, marcaba golazos y se lucía con la selección de su país.
El volante ofensivo salió de las categorías inferiores del Lille de Francia y al momento de su ascenso al primer equipo, en 2008, su ficha apenas llegaba a los 400 mil euros. En el plantel profesional de Lille, Hazard empezó a mostrar su calidad y para el 2009 duplicó su precio. Los siguientes tres años, el valor del jugador pasó a las dos cifras llegando a cotizarse en 14 millones de euros.
En 2012, Chelsea preguntó por él y Lille pidió 35 millones de euros, una cifra que los ingleses pagaron sin problemas. Jugando en la Premier League, Hazard se convirtió en figura y en 2018 costaba 95 millones de euros. Un año después se fue al Real Madrid. Allí, empezó el martirio de sus lesiones y el valor de su ficha se cayó. Cien millones a inicios del 2020 y para mitad del año ya costaba solo 60 millones. Actualmente, se cotiza en apenas 40 millones y no hay comprador a la vista.
Las lesiones del ‘Duque’
La primera temporada en Real Madrd fue, como el mismo Hazard reconoció, la peor de su carrera deportiva. En 2019 todo empezó con un estado físico maltrecho y subido de peso. Se perdió los tres primeros partidos de LaLiga Santander por molestias en el muslo. En noviembre sufrió una dura entrada y quedó afectado del tobillo derecho. Reapareció 83 días después, pero sufrió una fisura en el peroné distal derecho que le obligó, quince días más tarde, a pasar por el quirófano.
En 2020 volvió a caer. Se resintió de su lesión al tobillo y sufrió una dolencia muscular. Cerró el año con tres dolencias más: una en la espinilla, otra en la corva y la tercera en el tobillo. Además, se contagió de COVID-19. Ya en 2021, en enero sufrió una distención muscular y la última, ahora en marzo, ha sido una dolencia en el “psoas derecho”, tal como informó el Madrid.