Totalmente indignado y molesto terminó Juan Román Riquelme tras la caída de Boca ante Gimnasia de este sábado, en un partido de bajo nivel del ‘Xeneize’ por la Liga Profesional Argentina que pone en riesgo su clasificación a la próxima Copa Libertadores.
A pesar de estar en superioridad numérica desde los 67′, en el conjunto dirigido por Sebastián Battaglia nunca logró descontar y perdió por la mínima como local en la Bombonera, que se había preparado para vivir una fiesta por lo que hubiese sido el cumpleaños 61 de Diego Armando Maradona.
El resultado provocó un clima de tensión total en Boca, como se pudo ver al final del encuentro, cuando el máximo ídolo y actual vicepresidente del club decidió reunirse de emergencia con el plantel.
Los jugadores e integrantes del cuerpo técnico ya estaban duchados y se encontraban a bordo del bus que los sacaría de la Bombonera, pero Riquelme bajó a todos y los juntó al interior del popular recinto bonaerense.
Un gol del ‘Pulga’ Rodríguez de penal le alcanzó a Gimnasia para lograr un triunfo que dejó a Boca en el sexto lugar de la tabla anual argentina, que otorga tres lugares para la Copa Libertadores del año próximo. Solo faltan seis jornadas para la finalización del torneo.
El ‘Xeneize’ contó desde el arranque con Carlos Zambrano y Luis Advíncula, integrantes de la selección peruana, quienes no tuvieron su mejor noche.