Gerard Piqué puso punto final a su carrera y lo hizo con la camiseta de Barcelona en el Camp Nou. Cuando se salía del campo, fue ovacionado por los hinchas y además, en la línea del terreno de juego, recibió un emotivo abrazado de Xavi Hernández, el DT del cuadro azulgrana, con quien compartió vestuario en el club y la selección española.
Tras el partido ante Almería que culminó en victoria (2-0), el estratega del cuadro culé llenó de elogios a su amigo. “Ha sido una noche especial, completa. Sobre todo para Gerard. Era importante ganar y acabar de la mejor manera. Creo que se lo merece porque es leyenda de este club”, señaló en conferencia de prensa.
“Ha hecho un gran partido personalmente y el equipo también. Tres puntos y la mejor despedida para Gerard, la estima de la gente. Esto se lo llevará a la tumba”, añadió el estratega español.
De la misma manera, reconoció su trayectoria en el club blaugrana durante las quince temporadas que estuvo. “Cuanto más grande es el partido, más rinde. Le he dicho que es leyenda en el Barça y estamos muy agradecidos por sus años al club”, mencionó.
Cabe mencionar que Gerard Piqué y Xavi Hernández fueron compañeros durante siete años en Barcelona. De la misma manera, conformaron el equipo campeón de España en el Mundial de Sudáfrica 2010.
Piqué rompió en llanto en su discurso de despedida: “Esto no es un adiós”
Luego de la victoria de Barcelona, el exjugador se despidió de los hinchas. “Era el momento de darnos espacio, un poco de aire, y estoy convencido de que en un futuro volveré a estar aquí”, dijo el central catalán que, poco después de pronunciar estas palabras, escuchó como muchos aficionados gritaban: “¡President!” (“¡Presidente!”).
Piqué, que ante el Almería (2-0) jugó de inicio y recibió una ovación atronadora de su afición al ser sustituido en el minuto 84 por Andreas Christensen, se mostró visiblemente emocionado a lo largo de un discurso que empezó agradeciendo a todas las personas que ayudan a los futbolistas en su “día a día”.
“En la vida, cuando te haces mayor, te das cuenta de que amar a veces es irse”, sentenció Piqué, que en ese momento tuvo que parar su discurso por la emoción. “Esto no es un adiós, ya me fui con 17 años y regresé. Mi abuelo me hizo socio el día que nací. Nací aquí y moriré aquí. ¡Visca el Barça, siempre!”, añadió.