Ahora es un hombre con muchas responsabilidades. Mantiene un hogar y cuida una imagen. Ya no es más el ‘Rei’ de una Sub 17. se ha convertido en Don Reimond o Señor Manco. Tiene un hijo de 7 meses, una hija por venir y convive con una mujer de nombre Lilia Moretti. Ya ha convertido dos goles en dos partidos en y lo celebra distinto, porque lleva una vida diferente.

“Estoy trabajando a conciencia por mi familia”, comentó Reimond Manco una noche después de convertirse en el ‘héroe’ de Alianza Lima al marcar el 2-1 a la San Martín.

Ya no responde al grito de la tribuna, ni de la calle. Hay razones para ese cambio. “Que hablen lo que quieran, también que critiquen como les dé la gana. Nos matamos en la cancha porque en casa está el principal motor para nuestro esfuerzo”, explicó Reimond Manco.

Pregunta obligada era saber cómo va la relación con su técnico. “El profesor me dio confianza. Mis goles y juego son obra de su equipo de trabajo que me esperó y esperó, y sabe cuándo mandarme en el equipo titular o suplente. Necesito regularidad para seguir mejorando”, añadió Reimond Manco.

Finalmente, una sentencia conocida pero válida. “Por ser Alianza Lima, hay que ganar en cualquier lado”.

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