En los años 90, Juan Manuel Olivares estaba en el ranking de los defensas más fuertes y ‘arreglados’ de nuestro fútbol. Cuando llegó a Universitario conoció a Roberto Martínez, forjó una amistad y nació una leyenda donde en una reunión impactó a la mexicana Alejandra Guzmán, pero ella se decepcionó cuando el popular ‘Camioneta’ le hizo una pregunta poco romántica. Esta es la versión del protagonista.
Sí, Roberto Martínez me pidió que lo acompañe a una reunión.
Mentira, esa historia la inventó el capitán.
Primero, déjame decirte que cuando hablo con ‘Robert’ le digo: ‘Han pasado 25 años y cada vez le cambias y agregas más detalles a la historia.
Fuimos a una discoteca de San Isidro, estaba Gisela Valcárcel que era esposa de él, también habían otros actores.
Cuando me presentaron a la rockera mexicana, ella hizo espacio para que me sentara a su lado.
Sí y bailamos, pero no soy un gran bailarín.
Claro y ella se puso a tomar.
Le dije que si de allí podíamos hacer algo en otro lado.
Quedamos que la iba a seguir.
Vino su peluquero y se la llevó en una limusina.
Martínez, que siempre llegaba tarde a los entrenamientos, al día siguiente fue el primerito en aparecer y contó todo a su manera.
Nadie creyó en mi versión.
Era una niñita. Cada vez que el ‘Puma’ se refería a ella le preguntaba: ‘¿Cómo está Entel?’.
Una vez él, Alexis Ubillús y yo fuimos a buscar ropa al Jirón de la Unión.
No pudimos comprar. Como 80 personas se amontonaron a pedirle autógrafos al ‘Puma’ y, sin molestarse, cumplió con todos.
A varios que estaban bien ‘chancados’ les decía: ‘Feos de m...’
Otra vez Roberto Martínez. Se averiguaba la vida de ellos, los vacilaba y los ponía locos.
Roberto Chale, cuando me dirigió en Municipal.
En el hotel nos habló: ‘Hay que ganar muchachos, es importante para nosotros’.
El problema es que llegamos al estadio y nunca se apareció.
Fuimos a buscarlo y lo encontramos en la puerta de su casa.
Eso le preguntamos y su respuesta fue: ‘Los vi por televisión, alentándolos con dos cervecitas al lado’.
Paolo Maldonado, que había regresado a la ‘U'.
Estaba en Pesquero y enfrentábamos a los cremas. Antes del partido le avisé al ‘Chato’: ‘Ten cuidado, nos han dicho que debemos salir a partirte, dos jugadores te van a reventar’.
No, pero en la cancha desapareció, jugó tenso, preocupado.
Sí. Le dije: ‘Maricón de m... nadie había mandado a golpearte y te asustaste’.
Acompañaba a mi papá a fulbitear y como a él le decían ‘Camión’ me bautizaron así.
A ustedes por acordarse de mí y a cuidarse que esta pandemia debe pasar pronto.
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