El esposo de Britney Spears, Sam Asghari sorprendió al pronunciarse sobre la salud mental de la cantante, luego de que aparecieran una serie de especulaciones en línea, las cuales afirmaban que él era parte de una intervención a la que la diva del pop había sido sometida por estar inmersa en problemas de abuso de drogas.
Según se rumoreaba, Sam habría tratado de convencer a Spears de que necesita ayuda; sin embargo, eso nunca ocurrió porque Britney se habría enterado del plan. Asimismo, se decía que la estrella había accedido visitar a un médico y que le habría ido bien; sin embargo, esta historia ha sido aclarada por Asghari.
El actor aclaró y reveló su versión de la historia alegando, a través de un comunicado enviado a Access Hollywood, lo siguiente: “No se produjo una intervención. Mi esposa tiene el control total de su vida y seguirá tomando todas las decisiones relacionadas con su cuidado, independientemente de las circunstancias. Las especulaciones sobre su salud son inapropiadas y deberían terminar de inmediato”.
El último jueves, Britney Spears también decidió aclararle a sus fans cómo se encuentra y a través de sus redes sociales acusó a los medios de comunicación de inventarse historias alarmistas sobre ella.
“Mi estómago enferma al ver que es legal que algunas personas se inventen la historia de que he estado a punto de morir… Quiero decir, esto ha llegado a un punto en el que tengo que decir basta. La verdad es que no me sorprende, obviamente hay mucha gente que no me desea nada bueno. Pero, de nuevo, lo estoy haciendo lo mejor posible”, apuntó.
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