Flavio Peniche, el hermano menor de Arturo Peniche, también es un destacado actor mexicano, pero a diferencia del galán de telenovelas, el primero se ha destacado en el cine. Sin embargo en 2003 estuvo envuelto en un terrible accidente y termino siendo acusado de homicidio imprudencial.
Resulta que el hermano del recordado galán de “María Mercedes” fue convocado para ser el protagonista de una película independiente y nunca imagino que su vida quedaría marcada para siempre por culpa del productor y utilero de la producción.
Flavio se encontraba grabando una de las escenas cuando de casualidad asesinó a un hombre y él pensó que la sangre era parte de la ficción, sin embargo, el arma que había usado tenía balas de verdad y finalmente asesino al extra.
El actor fue acusado de homicidio y esto fue lo que sucedió con Peniche tras ser el protagonista de esta penosa situación.
¿QUÉ PASÓ CON FLAVIO PENICHE?
El lunes 15 de agosto de 2003 la vida de Flavio Peniche cambió por completo al matar a una persona sin querer. El actor se encontraba filmaba una película de bajo presupuesto de nombre ‘La Venganza de la Alacrana’ y que formaba parte de una saga de ‘video homes’ llamada ‘Juana la Alacrana’.
El hermano menor de Arturo Peniche, tenía una escena donde llegaba a una casa y tenía que matar a unos sicarios, entre ellos a un extra de nombre Antonio Velasco Gutiérrez, quien murió en realidad ya que la bala alojada en el arma de utilería era verdadera. Por ello, Flavio fue acusado de asesinato imprudencial.
El extra, conocido como ‘El flaquito’ murió horas más tarde en el hospital, aunque Flavio trató de salvarlo pero toda ayuda fue inútil. En aquel entonces Peniche fue citado y encarcelado por las autoridades de Morelos. Sus abogados lograron demostrar que había sido un accidente y pagaron la fianza de 40 mil dólares para enfrentar el proceso en libertad.
Flavio Peniche expresaba en ese momento: “Fue algo muy impresionante, pensé que era sangre ficticia, me puse como loco, me pegaba, decía que no era posible, que era un sueño, pero lamentablemente ha sido la peor pesadilla de mi vida. Si yo pudiera dar mi vida por la de él lo haría, porque es muy fuerte cargar con esto”.
Las autoridades mexicanas buscaron al productor de la película, Eduardo Martínez Sánchez, y a un utilero que era de su confianza conocido como “El Cepillo” a quienes nunca encontraron, por lo que Flavio fue quien tuvo que encarar a la justicia solo.
El calvario del actor acabó luego de 14 años en la que todas las semanas iba a un reclusorio a firmar su libertad condicional y así saldó su deuda ante la sociedad de manera definitiva.