En el 2008 se estrenó la telenovela “El rostro de Analía” que fue protagonizada por Elizabeth Gutiérrez y Martin Karpan; además, contaba con las antagónicas de Maritza Rodríguez, Gabriel Porras y Zully Montero. Fue tanta la química que existía entre los personajes principales que rápidamente se convirtió en uno de los melodramas estadounidenses en español con más éxito en Telemundo.
Ya han pasado 13 años desde que se emitió esta producción y poco han ido saliendo algunos secreto de las grabaciones y todo a raíz de la publicación que hizo Gutiérrez a través de sus redes sociales y más allá de que Telemundo no la quería como protagonista, también existieron algunos desacuerdos entre los actores del elenco principal.
Lo que se llegó a saber es que Martín Karpan y Sarah Mintz –antes Maritza Rodríguez– no existió mucha química y esto los llevó a tener muchos desencuentros a pesar que ellos tenían mucha interacción dentro de la telenovela.
¿QUÉ PASÓ ENTRE MARTÍN KARPAN Y MARITZA RODRÍGUEZ?
Sarah Mintz hizo una trasmisión en vivo a través de su cuenta oficial de Facebook y contó como fue su experiencia en la telenovela “El rostro de Analía” y por qué tuvo tantos desencuentros con Martín Karpan.
“Tantos meses uno grabando en un estudio compartiendo tantas horas uno quiere llevarse bien con los compañeros y esa vez yo no me llevaba bien, o él no se llevaba bien conmigo”, aseveró Mintz. “Nunca entendí, yo decía: ‘¿Yo le caigo mal?’. Tuvimos nuestra buena discusión fuera del set, o sea él me hacía unas burlas”, detalló la exactriz de telenovelas.
La exactriz rememoró que hubo un día, incluso, en el que no aguantó más y tuvo que salirse del set de grabación.
“Por respeto al estudio, por respeto al director, a mis compañeros no quise hablar, agarré, le dije: ‘Lo siento, me salgo del estudio’. Nos fuimos al camerino a hablar nuestras cuentas, a decirnos las cosas de frente y lo vamos a arreglar y vamos a ser profesionales’. Y más que mi personaje era como la amante de él”, explicó. “Me acuerdo que teníamos escenas de cama y yo lo tenía que besar con gran agrado y todo, pero esa sí que era una gran actuación”.
Sarah Mintz, no obstante, dejó claro que su conflicto con el actor nunca pasó a mayores ni afectó al ambiente de trabajo de la telenovela, el cual definió como muy armonioso.