Yo soy Betty, la fea es una de las telenovelas más exitosas de todos los tiempos, al haber sido transmitida y retransmitida en más de 180 países, doblada a 25 idiomas, tener más de 28 adaptaciones y ser la ganadora del Guinness Records 2010. No solo eso, pues con su regreso a las pantallas a través de Netflix, la novela colombiana ha captado la atención de todos al recordar a la popular Beatriz Pinzón.
Pese a la gran aceptación que tuvo y tiene en la actualidad debido a la interpretación de todos los personajes, una escena no pasó desapercibida por quienes la miraron por primera vez e hicieron sentir su malestar a través de las redes sociales.
Y es que además de calificarla de machista, misógina y homofóbica, hay algo que los internautas no perdonan en la telenovela de escrita por Fernando Gaitán y lanzada el 25 de octubre de 1999. A continuación, te contamos de cuál se trata.
¿A QUÉ ESCENA SE REFIEREN?
Aunque las peleas entre Armando Mendoza (Jorge Enrique Abello) con Patricia Fernández (Lorna Paz) eran constantes a lo largo de los capítulos, hay una escena que causó indignación en los internautas.
Resulta que en esas tantas discusiones que sostenían ambos personajes, de los insultos se pasaron a las agresiones físicas cuando Armando cogió de los cabellos a su secretaria, para posteriormente jalonearla.
Esto causó el malestar de la gente que solicitó en redes sociales a Netflix censurar dicha escena por promover el maltrato hacia la mujer.
¿QUÉ DIJERON EN REDES SOCIALES?
En las redes sociales, la gente mostró su malestar y decepción por cómo una escena tan ruda pudo estar incluida en la serie.
“El capítulo en el que Armando Mendoza le jala el cabello a Patricia Fernández (la peliteñida) da para una demanda por agresión física y acoso laboral”, escribió la usuario Darling Diaz Díaz.
Otro varios dijeron que a pesar de tratarse de una ficción, el maltrato jamás debe permitirse bajo ninguna circunstancia.
¿POR QUÉ SEGUIMOS ENGANCHADOS CON “YO SOY BETTY, LA FEA”?
ROMPE ESTEREOTIPOS
La historia de “Yo soy Betty, la fea" está centrada en la vida de Beatriz Aurora Pinzón Solano, interpretada por la actriz colombiana Ana María Orozco, una mujer poco atractiva para los cánones de belleza socialmente aceptados, que trabajaba en la compañía Ecomoda. Es este cuestionamiento del imaginario el que juega un papel fundamental en la mecánica de la historia, pues es incrustado precisamente en una empresa del rubro de la moda, tantas veces señalada por sus estándares.
Ese factor de sentirnos los extraños, los ‘outsiders’ dentro de cualquier entorno, constituyó uno de los grandes ganchos de empatía con la audiencia. “Es posible que esa rareza haya catapultado a Betty al éxito porque es algo que todos sentimos por dentro como seres humanos y creemos que nos van a rechazar por esa razón cuando es lo más bonito que tenemos y lo que nos hace singulares”, afirmó en su momento Jorge Enrique Abello, el recordado Armando Mendoza de la serie.
¿UNA CENICIENTA MODERNA?
“Yo soy Betty, la fea” tiene como principal arma un abanico de personajes entrañables que guardan coherencia dentro del entorno de ficción. En la delgada línea de lo verosímil y lo caricaturesco, Gaitán nos narra el proceso de Beatriz Pinzón, desde su tímida incursión en Ecomoda, hasta convertirse en la jefa de un negocio en el que inicialmente había sido rechazada.
Pero la metamorfosis de Beatriz Pinzón va mucho más allá de el inspirador caso de ascenso. La frescura de “Yo soy Betty, la fea” aún es valorada hoy, pues supo sortear, en sus más de 160 capítulos, su original denominación de telenovela. De hecho, el humor digerible del programa la ha llevado a ser considerada como una sitcom y posicionarse como una teleserie cuyo timing y manejo del drama le permite competir con propuestas más actuales en Netflix.