En medio de la filtración de algunos detalles sobre el acuerdo de divorcio al que han llegado Kim Kardashian y Kanye West para ponerle fin a su matrimonio de casi 7 años, la estrella del reality show ‘Keeping Up with the Kardashians’ se dio tiempo para compartir en Instagram una enternecedora fotografía familiar junto a North West y sus dos perritos Sushi y Saké, quienes llevan una vida llena de glamour al pertenecer al famoso clan Kardashian-Jenner pero, ¿cómo llegaron a la mansión de Hidden Hills valorada en 60 millones de dólares? Esta es su sorprendente historia.
MÁS INFORMACIÓN | Kim Kardashian y la explicación de por qué su hija tiene un lagarto ‘fashion’ como mascota
En septiembre de 2019, la hermana de Kourtney Kardashian presentó a dos de sus canes de raza Pomerania, una cachorrita de color blanco y otro macho negro. Mediante sus redes sociales, ella solicitó ayuda para encontrarle nombre a los nuevos integrantes de la familia West Kardashian, quienes ya tenían a la pequeña Sushi. En esa oportunidad, se supo que su hija mayor propuso Saké para la hembra y Soba (Noodle) o Soy Sauce (salsa de soja) para el oscuro.
En su cuenta de Instagram, Kim Kardashian no ha dejado de compartir diversas imágenes de sus mascotas, así como los privilegios que disfrutan a diario.
Incluso Sushi, su primera perrita de raza Pomerania, es la consentida de la celebridad quien no solo ha mostrado sus atuendos de diseñador, sino que la volvió aún más famosa cuando invitó a Cesar Millán (el encantador de perros) a su mansión para corregir su comportamiento, pues no dejaba de ladrar todo el día.
La mascota fue un regalo de Kim Kardashian y Kanye West para su hija North en su cumpleaños número cuatro y llegó a casa junto a su hermana, pero terminó mudándose donde Kourtney Kardashian para acompañar a Penélope Disick, quien le puso como nombre Honey.
En la actualidad, Sushi, Soba y Saké son felices al lado de Kim Kardashian y sus cuatro hijos North West (7), Saint West (5), Chicago West (3) y Psalm West (22 meses); además de ‘Speed’, un exótico lagarto que usa pijama rosa de ‘Skims’ y que pone el toque diferente a la mansión Kardashian en Calabasas.