Durante estos años, los paparazzi han perseguido a Kendall Jenner a cada lado que va. Ya sean desfiles, fiestas, ceremonias o una simple salida con sus amigas, la musa siempre se ve rodeada de muchos fotógrafos, quienes desean tener la imagen abridora de una buena nota o crónica.
Esta situación ha motivado, en no pocas ocasiones, una mala reacción por parte de Kendall Jenner. Ello, irónicamente, también es material para los 'urracos'.
Un ejemplo de ello se vio esta semana, cuando Kendall Jenner acudió a un café de Beverly Hills. Las fotos tomadas por los reporteros mostraron a Kendall Jenner con una expresión arisca y evasiva con ellos en todo momento.
Como ha pasado en otras oportunidades, Kendall Jenner se tapó el rostro para arruinar las imágenes, objetivo que no logró. Es más, con esta actitud le terminó dando balas a sus haters, los cuales se cuenta por millones en las redes sociales.