El pasado 8 de octubre Geraldine Bazán anunció, a través de un comunicado que compartió en cuenta en Instagram, que su matrimonio con Gabriel Soto, el cual duró 10 años, había concluido legalmente.
En dicha publicación, Geraldine Bazán precisó que todos los acuerdos a los que había llegado con Gabriel Soto se mantendrían en secreto “con la única finalidad de proteger el bienestar” de sus hijas.
Sin embargo, los días posteriores al anuncio, empezaron a conocerse algunos de los arreglos a los que llegaron Geraldine Bazán y Gabriel Soto para poder dar por finalizada su unión.
El primero de ellos fue que Gabriel Soto entregaría a Geraldine Bazán 250 mil pesos mexicanos (poco más de US$13 mil) mensuales para la manutención de las dos niñas fruto de su relación.
Sin embargo, la revista TV y Novelas acaba de revelar, en exclusiva, unos documentos en los que consta que Gabriel Soto ha garantizado una vivienda, con nanas y chofer para sus hijas Elissa Marie y Alexa Miranda, de 9 y 4 años respectivamente.
Asimismo, Gabriel Soto se comprometió ante la ley a asumir el pago de los servicios de cable, agua, luz, teléfono, los impuestos a la propiedad y el mantenimiento de la residencia en la que vive Geraldine Bazán con las pequeñas, así como el seguro médico de las tres.
Sin embargo, en caso de que Geraldine Bazán se enamore nuevamente y decida iniciar la convivencia con su nueva pareja, Gabriel Soto haría valer su derecho a desalojarla del inmueble y dejaría de pagarle el seguro médico.
Ello debido a que la residencia en la que vive Geraldine Bazán con las dos hijas que procreó junto a Gabriel Soto, fue comprada por el actor antes de casarse, pero podría llevarse todos los muebles, así como sus bienes personales.
Por otro lado, en el acuerdo Gabriel Soto se comprometió a darles a sus hijas US$3,100 para vacaciones. Geraldine Bazán será quien decidirá si utiliza el dinero en un solo viaje o en varios, pero deberá presentar el sustento de los gasto, así como itinerarios y recibos.
Geraldine Bazán se quedó además con una tarjeta de crédito que paga Gabriel Soto y que solo podrá utilizar para transacciones relacionadas con sus hijas, la cuales deberán ser autorizadas previamente por el actor.
En cuanto al régimen de visitas, quedó estipulado que Gabriel Soto podrá estar con sus hijas dos fines de semana al mes, pasando por ellas los viernes, al salir del colegio y entregándolas en el mismo lugar el lunes en la mañana.
Además, Gabriel Soto está autorizado a ver a las niñas dos días a la semana, recogerlas en su residencia y regresarlas a una hora acordada por las partes, mientras que en Navidad y Año Nuevo, las niñas pasarán una fecha con su mamá y la otra con su papá, variando el siguiente año.