Fue gracias a las gemelas Paola Bracho y Paulina Martínez en que Gabriela Spanic llegó a ser reconocida internacionalmente, y aunque antes de protagonizar este doble papel en la telenovela de 1998 había participado en otras tres producciones, ella supo hacerse un nombre en el mundo del entretenimiento venezolano, mexicano, colombiano y estadounidense.

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Hoy con cerca de tres décadas de carrera artística, la actriz de 47 años recordó que su camino hacia la fama no fue nada fácil, por lo que tuvo que luchar para salir adelante. “Yo no vengo de una familia de alcurnia, de una familia millonaria, siempre soñé con ser actriz y hacer mi sueño realidad. No fue fácil, yo tomaba metro, tomaba autobús, desde muy temprana edad yo era extra”, contó al .

Pero antes de entrar de lleno a la actuación, la venezolana cursó estudios universitarios, los cuales no pudo concluir porque empezó a ser llamada a algunos proyectos televisivos.

En 1997 se casó con el actor venezolano Miguel de León, boda que fue transmitida en el show de televisión, de Venevisión, Súper Sábado Sensacional. años después se divorció. (Foto: Gabriela Spanic / Instagram)
En 1997 se casó con el actor venezolano Miguel de León, boda que fue transmitida en el show de televisión, de Venevisión, Súper Sábado Sensacional. años después se divorció. (Foto: Gabriela Spanic / Instagram)

ESTUDIÓ PSICOLOGÍA

Gaby Spanic comenzó a estudiar psicología, pero como no contaba con muchos recursos económicos, tuvo que salir de casa para ganar dinero y poder sobrevivir; es así que tuvo varios empleos mientras estudiaba en la universidad. “Vendí enciclopedias, vendí muchas cosas (…) Viví muchas cosas que la gente no sabe”, dio a conocer.

Sin embargo, al año de iniciar sus estudios decidió dejar su carrera para dedicarse a lo que siempre había soñado: la actuación. Su decisión no fue del agrado de sus padres, quienes buscaban que su hija sea una profesional, pero pronto demostró lo buena que era en los estudios de grabación, llegando a ser llamada para papeles principales.

Aunque pasó bastante tiempo desde que dejó la universidad, la actriz no descarta terminar su profesión. “No me gradué, pero todavía tengo el tiempo y el chance, a lo mejor Dios mediante a mi edad (…). Soy disléxica y ha sido muy difícil mi camino”.

En el 2010, estuvo envuelta en un escándalo, luego de que acusara a su asistente de presuntamente intentar envenenarla con sulfuro de amonio. (Foto: Gabriela Spanic / Instagram)
En el 2010, estuvo envuelta en un escándalo, luego de que acusara a su asistente de presuntamente intentar envenenarla con sulfuro de amonio. (Foto: Gabriela Spanic / Instagram)

LO PEOR PARA GABY SPANIC MIENTRAS GRABABA “LA USURPADORA”

Por muchos años, Gabriela Spanic ha dicho que su protagónico en “La usurpadora” ha sido una gran bendición por haber sido la elegida para el proyecto, pero hace algún tiempo confesó que vivió momentos de tensión y estrés detrás de cámaras.

La actriz ha confesado que los problemas vinieron por su acento, ya que no era del agrado de la reconocida Beatriz Sheridan (1934-2006), quien se encargó de la dirección del melodrama.

“Al principio no fue fácil, en Venezuela tenemos un acento muy particular, muy costeño, como el veracruzano, nosotros no pronunciamos las ‘s’. Ella me gritaba con su voz ronca: ‘¡Gabriela, ese acento!’. Me pusieron a trabajar con Adriana Barraza el acento, tuve la oportunidad de trabajar con ella, la amo con toda mi alma”, comentó.

Gabriela Spanic confesó que las exigencias llegaron a tal grado que en varias ocasiones lloró en el set de rodaje, pues a pesar de que trabajó para cambiar su acento, Sheridan no estaba conforme con su estilo.

“Yo ponía de mi parte, yo me escuchaba bien, creía que lo estaba haciendo bien, pero me enseñó muchísimo”, manifestó en entrevista para TLNovelas.

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