“El privilegio de amar” es una telenovela mexicana, producción de Carla Estrada, que se convirtió en fenómeno televisivo en Latinoamérica. Fue transmitida por Televisa entre los años 1998 y 1999, logrando altos índices de audiencia y ganándose un lugar especial en el corazón del público que hasta el día de hoy recuerda esta cautivadora historia.
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La telenovela mexicana fue protagonizada por Adela Noriega, René Strickler, Helena Rojo y Andrés García, además contó con las participaciones antagónicas de Cynthia Klitbo, Enrique Rocha, Marga López, Lorena Velázquez y Pedro Weber “Chatanuga”.
“El privilegio de amar” sigue la historia de Cristina Miranda, una joven que creció en un orfanato desde que tiene uso de razón, ya que fue abandonada por su mamá a las puertas de una casa en la calle. Con el paso del tiempo, Cristina se hace adulta y abandona el convento para emprender una vida independiente, entrando a trabajar en la casa de modas que precisamente dirige su madre, Luciana, sin sospechar el vínculo que las unía.
Al entrar a esta casa de modas, Cristina conoce a Víctor Manuel Duval y ambos se enamoran perdidamente e inician una historia de amor que se ve perturbada por intrigas de la familia de él. Además, Tamara no permite que Cristina y Víctor Manuel estén juntos.
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En la ficción, la antagonista era Tamara, personaje interpretado por la actriz Cynthia Klitbo. Uno de los momentos
En “El privilegio de amar”, la actriz Cynthia Klitbo interpretó a Tamara. Ella era la antagonista de la historia, quien compite con Cristina por el amor de Víctor Manuel, hijo de la Luciana.
Al no ver materializadas sus expectativas y perder a Víctor Manuel, Támara pierde la cordura y en un arrebato termina por raparse el cabello en su totalidad. Esta escena se convirtió en una de las más trascendentales de la carrea de Cynthia Klitbo.
Más de 20 años después del estreno de “El privilegio de amar”, la actriz contó cómo se grabó esta escena que hasta el día es recordada por los televidentes latinoamericanos.
De acuerdo con lo que la intérprete contó a su novio “Rey Grupero”, el final del personaje iba a ser totalmente distinto al que se mostró en pantalla, por lo cual Cynthia Klitbo pidió hablar con la productora Carla Estrada, a quien le sugirió otro desenlace.
La propuesta de Klitbo era que la mujer atentara en contra de su propia vida arrojándose de un puente después de cortarse el pelo, pero al final esta idea fue descartada por la realizadora. “Fue una escena que propuse porque venía de hacer muchas telenovelas como antagonista”, contó.
Según Cynthia, el primer corte que se hizo no fue efectivo, ya que únicamente se quitó algunos mechones de la melena, por lo cual tuvieron que volver a hacerla pasar por la máquina. “Me tuvieron que volver a echar el copetito. Es que me tusé”, dijo.
Finalmente la actriz dijo que aunque la escena fue grabada hace unos 26 años, la gente le da más peso a ese trabajo de lo que ella le da. Durante décadas, esta interpretación ha sido uno de los momentos más icónicos para la crítica y los amantes de este tipo de producciones.
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