Carlos es un varón que piensa bien. A él nada se le escapa, mucho menos cuando se trata de su negocio: la juguería Papá Papaya. Por eso, activó Bim en su celular y le sugirió a su proveedor de frutas que haga lo mismo. “Así estarás relajado cuando lleves tu plata”, le aconsejó, mientras se comían un sanguchón. ¿Y qué hizo el casero de la fruta? Obvio: activó Bim al toque. ¿Para qué esperar?

Ahora, cada vez que su proveedor llega a dejarle las ricas naranjas y las frescas granadillas, él ya no saca la plata delante de todos, sino chapa su celu y le manda la plata al toque con solo apretar unos cuantos botones. Así, ambos están más tranquilos. Ya no necesitan estar cargados de billetes y expuestos a los amigos de lo ajeno.

Hace poco, Carlos también se enteró de que no se pagan fuertes comisiones por enviar o mandar plata, como ocurre con otros servicios financieros. ¡Activar Bim es gratis! Para enviar plata solo se hace un pago mínimo: la persona que manda paga solo una china por montos menores o iguales a cien luquitas. Pero si el monto está entre los S/ 101 y S/ 500, la operación costará S/.1,50. Si quieres transferir de S/. 501 a S/. 999, será S/.2. ¡Nada más!

Ah, recuerda: con Bim no se paga el Impuesto a las Transferencias Financieras (ITF). ¿Es o no un golazo Bim?

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