Es el mes de octubre y el turrón de doña Pepa ya comenzó a tomar protagonismo en nuestra mesa. Este delicioso dulce bañada con miel de chancaca y decorado con grageas es una tentación, pero hay malos comerciantes que lo venden a bajos precios usando insumos adulterados.
Por eso, Luis Miguel López, subgerente de Sanidad y Promoción de la Salud de la comuna limeña, aconsejó a la población adquirir los turrones en lugares que brinden las garantías y evitar comprar productos ofrecidos en forma ambulatoria, es decir, en triciclos o carretillas. Agregó que los colores no deben ser muy intensos, ni muy amarillos ni anaranjados.
En cuanto al sabor, el especialista refirió que si el dulce del turrón sabe ácido, significa que presenta un grado de fermentación y ya no está apto para el consumo. También recomendó verificar el registro sanitario, que incluye la relación de insumos usados y la fecha de caducidad.
El consumo de un turrón adulterado podría ocasionar desde fuertes cuadros de intoxicación e infecciones estomacales, como vómitos, diarreas severas, parasitosis hasta alergias. Así que ya sabe, siga estos consejos para evitar problemas de salud durante este mes morado.