Triste y espeluznante. Un delincuente argentino, de 22 años, asesinó a balazos al padre y a la hermana mayor de su pareja, una adolescente de 15, quien le abrió la puerta de su casa, en San Miguel, para que perpetre el horrendo crimen, porque la familia se oponía a su relación sentimental. El plan de la pareja habría sido escapar a Argentina, pero la policía los atrapó junto a un licenciado del Ejército, a quien tuvieron como cómplice.
ABRIÓ LA PUERTA
A las 10:20 de la noche del sábado fue ejecutado el macabro plan en el primer piso de la casa ubicada en el jirón Cristóbal de Losada y Puga 129, etapa 1 de la urbanización Pando. El jefe de la Dirincri, general PNP José Lavalle, expresó: “La menor Athena R.D. (15) facilitó el acceso a su vivienda al enamorado, el argentino Juan Manuel Salinas Helder (22), quien tenía una pistola adaptada con un silenciador artesanal”.
Añadió que el extranjero llegó acompañado del licenciado EP Carlos César Yacila Gallardo (37), quien llevaba una pistola Baikal, 380, calibre 9 milímetros, abastecida con ocho municiones, guantes quirúrgicos y una máscara. Según las pericias de los expertos de Criminalística, una vez dentro de la casa, el gaucho disparó en el abdomen a la estudiante de cocina Grecia Gisell Ruiz Degollar (21) cuando estaba sentada en la sala, frente a la computadora. Al escuchar ruidos, el ingeniero industrial Jorge Bibiano Ruiz Lozano (58), papá de ambas chicas, bajó de su habitación y fue abaleado en el estómago.
Los asesinos trataron de huir por la azotea, pero fueron reducidos por unos policías que llegaron luego de ser alertados por los vecinos que escucharon tiros.
“El móvil sería la venganza, porque los padres no aceptaban la relación con el ciudadano argentino porque la chica era muy joven. No se descarta el lucro, pues la víctima tenía patrimonio”, acotó Lavalle.
DESMAYADOS
En la escena del crimen, la quinceañera, que tiempo atrás habría llevado tratamiento psiquiátrico, sufrió una crisis nerviosa y fue llevada a una clínica, donde aseguró tener tres semanas de gestación. El extranjero tuvo un ataque de epilepsia.
Quien se salvó fue Gisella Degollar, mamá de Grecia y Athena, pues había ido a recoger unos anteojos para la menor de sus hijas. Se sabe que las cámaras de seguridad de la casa habrían sido desconectadas antes del homicidio y la sindicada sería la menor.
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