Por: Miguel Ramírez / Periodista de investigación

“A mis enemigos políticos les aplico la ley; a mis amigos los blindo”, parece ser el lema de los congresistas fujimoristas y sus aliados apristas de la Comisión de Ética Parlamentaria, que más bien debería llamarse el ‘Club con mis amigos no te metas’.

Tal es el caso de la congresista fujimorista . Sobre ella pesan abundantes indicios sobre un probable tráfico de influencias a favor del empresario pesquero Óscar Peña, considerado como el ‘rey de la pesca negra’, quien hoy se encuentra prófugo acusado de pertenecer, nada menos, que a la organización de ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’.

A Letona, sin embargo, no le entran balas. Sus amigos de esa comisión –¡que ella también integra!– creen en su santa palabra. Dice que los ataques en su contra los promueve su otrora amigazo de bancada, Daniel Salaverry.

“Yo doy la cara”, dice la congresista. Claro, porque sabe que sus amigos la blindan.

La semana pasada se difundió un audio grabado el 2012 –cuando aún no era congresista– donde se jactaba de tener importantes contactos en el Congreso y ofrecía ‘tumbarse’ una resolución ministerial que perjudicaba a su cliente Óscar Peña, también conocido como ‘el rey de las medidas cautelares’.

El hecho revelado parece indicar que Letona confunde su papel de ex abogada privada con el de congresista de la República.

Antes de ser parlamentaria fue asesora de los exministros Rafael Rey, Elena Conterno y Mercedes Aráoz, cuando estos estuvieron en el Ministerio de la Producción, que se encarga de otorgar las licencias de pesca. Luego pasó a trabajar en un estudio jurídico, cuyos clientes eran empresarios pesqueros.

Como abogada, Letona entraba a ese ministerio como ‘Pedro en su casa’. Según el registro de visitas, entre el 2010 y el 2016 visitó 89 veces ese portafolio, 26 de las cuales fueron a los despachos ministeriales.

Y ya siendo congresista, Letona ha continuado manteniendo contacto con sus exclientes, como Óscar Peña.

Hace un mes, por ejemplo, se descubrió que el año 2017, siendo parlamentaria, se comunicó hasta en seis oportunidades con Peña. La comunicación más larga duró 6 minutos y 11 segundos.

Cuando este caso fue llevado a la Comisión de Ética, simplemente fue archivado. La votación para investigarla o no estaba empatada. Todo quedó en manos de la presidenta de ese grupo, la congresista Janet Sánchez, quien la protegió. Sánchez votó para que Letona no fuera investigada.

Sánchez, por cierto, también fue protegida por los miembros de su comisión, que se opusieron a investigarla cuando fue denunciada por cobrar S/. 2,800 para realizar actividades de representación, cosa que nunca hizo.

Con estas nuevas evidencias, varios congresistas de diversas bancadas han pedido a la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, investigar a la congresista Letona. ¿Qué harán esta vez Janet Sánchez y el ‘Club con mis amigos no te metas’? Nos vemos el otro martes.

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