La presidenta Dina Boluarte participó en la 78 Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, pero la noticia fue la desafortunada frase que lanzó a la periodista Angélica Valdés, quien le consultó por las estrategias de su gobierno para frenar la delincuencia que azota al país. ‘Está un poco agresiva con su pregunta’, le dijo Boluarte a la enviada especial de Canal N, quien tiene más de 23 años ‘corriendo la cancha’.
Angélica, fuiste noticia esta semana porque Dina Boluarte dijo que tu pregunta fue agresiva, ¿cómo lo tomaste?
Inicialmente, me sentí un poco confundida porque pensé que con el calor del momento quizá sí lo había sido. Pero, en realidad, como todos vieron, estaba con el micro en la mano, con el trípode en la mano, estaba insistiendo porque creo que cualquier periodista lo hubiese hecho. Yo confié porque ella cuando ingresó me dijo: ‘saliendo te doy la entrevista’. Ella sale y yo hice lo que cualquier periodista de verdad hubiera hecho, seguirle y preguntarle.
¿Cómo consideras esta reacción, esa frase?
Falta de experiencia política porque pudo haberlo manejado de otra forma. Por la experiencia que tengo, he trabajado en coberturas de otros presidentes, normalmente cuando no querían hablar se detienen y dicen: ‘no voy a hablar ahorita, estoy ocupado. Te prometo que hablamos más tarde’. Es lo más correcto.
Un político debe rendir cuenta de su gestión, pero cuando no lo hace, ¿qué significa?
No podría calificarlo. Un político tiene la obligación de rendir cuentas al país, no a los periodistas, sino al país. Pero los periodistas somo el medio para trasladar las inquietudes, lo que la gente quiere saber. No me parece suficiente responder unas cuantas preguntas al canal del Estado, que no es el canal del gobierno, sino del Estado.
Se creó polémica porque las cuentas de redes sociales de la presidencia informaban de diversos ‘encuentros bilaterales’, uno fue con Joe Biden, ¿fue una reunión o una foto al paso?
De lo que pude ver en la agenda y comparando la de otros presidentes, bilateral, lo que se dice bilateral, ha sido con Paraguay y Chile. Pero de ahí, las demás reuniones han sido con funcionarios, empresarios…
¿Y con Joe Biden?
Me pareció extraño. Yo me conseguí la agenda y sabía que había una recepción ofrecida por el presidente de Estados Unidos, pero postearon la foto un día después. Eso no fue una reunión, fue una foto protocolar al ingreso del Museo Metropolitano de Arte. Una reunión es algo que coordinas, conversas, dialogan, tienen puntos en agenda, y en la agenda de Biden no había nada.
¿Te molestó que te dijera ‘señorita de Canal N’?
No, porque soy periodista de Canal N, pero tengo un nombre, ¿no? En las actividades que he cubierto de otros presidentes de la República siempre me han tratado directamente por mi nombre, pero no me afecta.
Ahora que estuviste en Nueva York hubo gente que gritó ‘Dina asesina’. ¿Fueron espontáneos, personas organizadas o de alguna agrupación política?
La impresión que me dio fue que eran peruanos que viven en el extranjero, no vi que estuviesen movilizados por alguien, vi que llegaban de a pocos. Eran pocas personas, no más de 15. Percibí que era gente que llegaba voluntariamente.
¿Cómo definirías a Dina Boluarte?
Es la presidenta de la República, me merece mucho respeto por su cargo. Hay mucha expectativa sobre ella. Hay una pregunta que se me quedó en el tintero y que tal vez me hubiera gustado preguntarle…
¿Cuál?
Me hubiera gustado preguntarle: ‘Es la primera presidenta del Perú, ¿cuál es el legado que espera o quisiera dejar para los peruanos?’. Lamentablemente, no le pude preguntar mucho.
Angélica, llevas ‘corriendo la cancha’ más de dos décadas, ¿en algún momento viste esta ola de criminalidad en el país?
No. Nunca tanto. Es muy peligroso ahora andar en la calle, es una perspectiva como periodista. El trabajo se ha vuelto más complicado, tú lo sabes. Como ciudadana, me preocupo. Vemos que no hay mejoras, me preocupa el futuro de mis hijos y de todos los peruanos del país.
¿Para ti está bien que salgan las Fuerzas Armadas a las calles?
Es una decisión difícil porque las Fuerzas Armadas tienen otro tipo de preparación, no están preparadas para el patrullaje. Su preparación es distinta. No sé si esa sea la solución al problema. El mismo jefe de gabinete ha dicho que recién están preparando una estrategia. Me gustaría saber cuál es la estrategia y en qué quedó la propuesta de la ‘Policía ciudadana’, que anunciaron en el mensaje a la Nación.
Muchos especialistas dicen que esta es una solución paliativa, efectista, a corto tiempo…
El Callao ha estado en declaratoria de emergencia mucho tiempo, ¿algo ha cambiado en el Callao?
Has estado viviendo fuera del país, ¿cómo ven al Perú desde el exterior?
Los peruanos siempre vemos al Perú con cariño, el Perú es algo muy fuerte, pero más allá de la nostalgia, en general, creo que lo que preocupa más es la falta de liderazgo, no hay un líder que tú digas ‘este puede ser el que nos va a conducir por el camino’. Por ejemplo, ¿convocar a elecciones en este momento solucionaría el problema? Es una pregunta que me haría.
¿Para ti cuándo deberían ser las elecciones?
Creo que (Dina) debería terminar el mandato. Ella ha sido elegida por un periodo. El problema es que no hay líderes, si vamos a elecciones en un año, ¿por quién votamos? No hay alguien que marque la cancha. Es difícil.
¿En estas circunstancias crees que un personaje como Antauro Humala podría tener oportunidades?
Es un candidato peligroso, pero realmente el descontento por la clase política es tanto… tú ves la pobreza, la desnutrición… el descontento puede llevar a las personas a malas decisiones.
En Estados Unidos cubriste algunas actividades de Pedro Castillo. ¿Lograste entrevistarlo?
No, porque Pedro Castillo nunca hablaba.
¿Por qué crees que Pedro Castillo en su periodo como presidente no daba la cara, no accedía a entrevistas?
Por falta de experiencia y manejo político. Eso, y mal asesorado, prefería no dar declaraciones para no meter la pata. Era alguien que no conocía nada de política, llegó de casualidad.
Para ti, ¿está justamente en prisión?
Creo que Pedro Castillo cometió un delito, lo vimos todos en cadena nacional. Él intentó un golpe de Estado, está en este momento en un penal porque la justicia considera que podía fugarse, creo que la justicia está haciendo su trabajo.
Has cubierto bastante política, ¿qué presidente era más accesible para responder?
Alan García. Al expresidente Alan García siempre le he preguntado de todo y siempre respondía porque ese es el tema, un político tiene que estar preparado para todo.
Y fuiste una de las últimas periodistas que lo entrevistó, ¿lo sentiste tranquilo?, ¿percibiste algo inusual?
Lo noté igual que siempre, no lo vi preocupado, lo vi normal, conversador. Estaba un poco distante quizá, porque siempre en la previa a la entrevista conversábamos. Él era alguien que se fijaba mucho en el encuadre…
¿Siempre quería salir bien?
Él decía ‘ponte a este lado’, él entraba y decía ‘nos organizamos’, ‘el micro no muy arriba’. Él era bien detallista con esos aspectos. Al camarógrafo le decía ‘no desde abajo, tiene que ser más arriba porque sino me va a salir mucha papada’.
¿Qué sentiste cuando te enteraste de su muerte a horas de tu entrevista?
Fue difícil porque fue un político, más allá de la polémica, la investigación, creo que la muerte de cualquier persona en esa forma es difícil.
¿Era muy galante, piropeador?
Conmigo siempre fue respetuoso, me decía ‘señora Angélica María’, no ‘señora de Canal N’, sino ‘señora Angélica María’, siempre ‘señora’. Era muy respetuoso.
¿Y tienes anécdotas con otros presidentes?
Ollanta Humala era más distante, serio, me parecía alguien más difícil de entrevistar, era parametrado con sus cosas.
¿Te hacía correr también?
Sí, él decía: ‘¿quieres una entrevista? Ya, en la punta del cerro’. Él había inaugurado unas obras de agua y desagüe en Carabayllo y corría.
¿Toledo?
Era bien conversador, sobre todo detrás de cámaras.
¿Viajaste en el ‘avión parrandero’?
Sí, el mal llamado ‘avión parrandero’ que era un avión de nuestra Fuerza Aérea. Lo conocí a él porque era la periodista que cubría las actividades del presidente.
¿Le sentiste alguna vez el tufillo de alcohol?
El presidente Toledo era conversador, como si fuera tu pata de barrio. Cuando regresábamos de comisión pasaba la comida, si le habían regalado un pisco o un aguardiente él servía y pasaba como si estuvieras en tu barrio, igualito.
Angélica ¿por qué crees que el Perú siempre está en crisis?
Porque no tenemos líderes, porque no tenemos un representante que piense en el país. Lo que siento y creo que, como periodista y ciudadana, no hay un líder y estamos rodeados, no todos, de políticos que solo piensan en sus intereses personales y en sacar su provecho y no pensar en el país.
¿Por qué hay tanta corrupción en el país y los presidentes terminan presos?
Insisto, no hay líderes, no hay políticos de carrera, políticos que tengan el verdadero compromiso. Repito, no todos. Así como a los periodistas nos encasillan, no todos somos así, cada uno responde por su trabajo.
¿Te han gritado mermelera?
Me han gritado mermelera, prensa amarilla, prensa basura. Yo siempre digo que son gajes del oficio. Yo siempre he sido una persona correcta, respetuosa con las autoridades y siempre he preguntado lo que he tenido que preguntar con respeto, ese es mi trabajo, es mi oficio.
Hay una frase ‘sin periodismo no hay democracia’…
Nosotros somos el vehículo para que la ciudadanía esté informada de todo, no solo de lo que algunos quieren que informemos.
¿Qué es lo que más te apasiona del periodismo?
Me apasiona la noticia, estar en el lugar de la noticia, la posibilidad de estar en el lugar de los hechos.
¿Cuál ha sido la comisión más dura que te tocó cubrir?
Tantas. Hay una comisión que me dejó una lección a pesar de lo duro y triste.
¿Cuál?
Cuando fue el terremoto de Pisco. En esos días el mar botó una maleta. Y había un cuerpo dentro de la maleta. En la maleta había una chica, pasó una semana y a la chica no la identificaban. Recuerdo que el jefe de medicina legal me llama y me lo comenta. La iban a mandar a la fosa común.
Y fueron…
Sí, entramos a la morgue, el cuerpo estaba descompuesto, sacaron a la chica y no se podía ni tomar foto. Me di cuenta de que la chica tenía un tatuaje de una mariposa. Le digo a mi camarógrafo que grabe, y con la imagen de la mariposa pudieron reconocer a la chica. Fue un caso muy sonado.
¿Qué lección te dejó?
Esa fue una experiencia. Es bien difícil porque a veces, cuando hemos estado en un lugar recogiendo la noticia, hay una violación o algo así, es bien difícil no quebrarse cuando estás recogiendo el dolor de las personas. Yo, ahora que soy mamá y tengo dos hijos, me conmuevo, es bien difícil no quebrarse.
Con tantas entrevistas políticas que has hecho, ¿tienes amistad con algún político?
Con ninguno. Conocidos, siempre con respeto. Siempre he intentado mantener mi distancia para evitar algún problema.
¿Alguna vez tu vida ha estado en riesgo en una comisión?
He ido a emboscadas terroristas, pero no. Recuerdo hace muchos años el caso de un loco que se metió a Gamarra y tomó un banco. Yo tenía como 7 meses de embarazo, me mandaron y me pidieron que haga una nota a los alrededores, cómo afecta al comercio, todo estaba paralizado. Cuando llegué, nos metimos a un edificio al frente del banco, trepamos, tanta era la adrenalina que no me preocupé del embarazo. Mi esposo me llamaba y me pedía que me cuidara.
¿Estuviste en emboscadas terroristas?
En Ayacucho, en Huamanga.
Ahora conduces en Canal N, ¿qué requisitos debe tener una presentadora de televisión?
Estar informada, preparada para todo, no solo de política, sino de economía, en general... Tiene que leer. Un periodista que no se informa no es periodista. Un periodista tiene que estar preparado para cualquier circunstancia.
¿Eres cercana a las redes sociales?
Me gusta, pero trato de tener mi distancia, hay mucha polarización. (Las redes) son una necesidad, las redes nos permite estar informados al momento. Es una necesidad. Pero también representa un porcentaje mínimo del Perú, hay que tomarlo con esa referencia.
¿Grabas TikTok?
No, no me da para tanto. Me gusta Instagram, Twitter, Facebook, pero TikTok no, pero es la más usada, todavía no me he animado.
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