El penal del cuartel Barbadillo se ha convertido en la ‘casa de los presidentes’. Por tal motivo, una serie de personajes suelen desfilar a diario para visitar a los exmandatarios encarcelados, como Alberto Fujimori o Pedro Castillo. Sin embargo, hay un inquilino que parece estar quedando en el olvido: Alejandro Toledo.
Según una información difundida por el Centro Liber, adscrito al Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) entre diciembre pasado y mayo de este año, unos 93 legisladores han visitado a los expresidentes Castillo (2021-2022) y Fujimori (1990-2000), mientras que Toledo (2001-2006) solo registra asistencias fiscales y médicas desde que fue extraditado de Estados Unidos.
Como señala este portal de investigación, el ‘Cholo de Cabana’ recibió a dos doctores el 26 de abril y luego a otro el 5 de mayo. Luego, el 8 y 9 de mayo fue visto por los fiscales José Domingo Pérez y Luz Flores Tamara para un interrogatorio enmarcado en la investigación contra Pedro Pablo Kuczynski por presunto lavado de activos.
Cabe recordar que el último 6 de junio, el exjefe de Estado fue trasladado al Hospital de Ate por una consulta médica. Esto luego de que, el último 3 del mismo mes, solicitara asistencia médica a las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) en las especialidades de “cardiología, urología y gastroenterología”. Según se conoció, Toledo Manrique tuvo crisis hipertensiva durante la consulta.
Toledo es investigado por los presuntos delitos de colusión, tráfico de influencias y lavado de activos por, de acuerdo a la tesis fiscal, haber recibido coimas de Odebrecht para favorecer a la empresa brasileña durante el proceso de licitación de los tramos II y III de la carretera Interoceánica.
Por su parte, su esposa, Eliane Karp, quien residía en EE.UU. él, viajó recientemente a Israel, por lo que la Fiscalía inició el requerimiento para su extradición y detención preventiva.
Según el informe del Centro Liber, Pedro Castillo ha recibido a 35 congresistas, pero el más recurrente fue Pasión Dávila (Bloque Magisterial), suspendido por 120 días por lanzar un puñetazo a Juan Burgos (Avanza País) durante un pleno.
De acuerdo con los oficios avalados por el Ministerio de Justicia y el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Dávila acudió a verlo de manera consecutiva del 17 al 22 de diciembre, con la única excepción del 21. Retornó nuevamente el día 27.
Entre febrero y marzo, hizo lo propio Roberto Sánchez, acusado de participar en el fallido autogolpe, así como Hamlet Echeverría (Perú Libre), Kelly Portalatino (Perú Libre) y Cruz María Zeta (Fuerza Popular), quien utilizó un helicóptero de la FAP para traslado de su hijo y pareja. Entre abril y mayo figuran los nombres de Paul Ticona, Lucinda Vásquez, Jhon Donayre, Betsy Chávez y Francis Paredes.A ellos se les suma una serie de visitas fiscales, cuatro relatores de Naciones Unidas, dos miembros de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), personal de salud del INPE, psicólogos y hasta un terapista auditivo.
Alberto Fujimori, quien cumple una sentencia de 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad, recibió, por su parte, a 58 legisladores desde diciembre. La congresista que registra el mayor número de ingresos es María Cordero Jon Tay, expulsada de Fuerza Popular tras la divulgación de un audio suyo en el que pide parte de su sueldo a uno de sus trabajadores.
Jon Tay, cuyas citas se repiten de cuatro a ocho veces por mes, mencionó que el recorte salarial era parte de una donación destinada a la compra de medicamentos para tratar a Fujimori, diagnosticado con cáncer a la lengua, taquicardia, hipertensión y gastritis hemorrágica.
Luego de la denuncia y con un proceso disciplinario a cuestas en la misma tienda naranja, la legisladora dejó de acudir a Barbadillo, según el registro.
Fujimori también recibió a Alejandro Aguinaga, Tania Ramirez, Martha Moyano, Hernando Guerra García, Rosángela Barbarán y Luis Cordero, acusado de integrar una presunta red de espionaje vinculada a Pedro Castillo.
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