¡Rompió su silencio! El ex presidente Alan García envió una carta dirigida a la opinión pública para explicar las razones por las que solicitó asilo diplomático a la República Oriental del Uruguay y en las que argumenta una supuesta "persecución política".
A través de nueve puntos, Alan García indicó que durante distintas gestiones de gobierno se le ha investigado por diversos presuntos delitos, sin encontrársele nada que lo vincule con actos ilícitos.
Alan García mencionó la creación de grupos de trabajo en el Congreso como la megacomisión durante el gobierno de Ollanta Humala y la Comisión Lava Jato, en las cuales tampoco se le encontró supuesta culpabilidad en los delitos que se le imputaban.
Asimismo, Alan García precisó que "en todas y cada una de las declaraciones bajo juramento que por acuerdo entre Perú y Brasil han ofrecido el dueño de la empresa Odebrecht y sus más altos funcionarios han reiterado que no tengo relación con ningún delito ni he recibido ni pedido algún beneficio para mí".
"Todos estos hechos comprueban cuánto y cómo estoy alejado de actos delictivos, por lo cual, en más de siete años de terminado mi gobierno no he tenido ningún proceso", sostuvo Alan García en su carta.
Alan García afirmó también que pagó los impuestos correspondientes por los honorarios que recibió por la conferencia que dio en el auditorio de la Federación Industrial de Sao Paulo, dinero que provendría de los ilícitos de la constructora Odebrecht. Esta última es la hipótesis de la fiscalía.
Además, señaló que recibió la advertencia de personal del equipo especial de las fiscalías anticorrupción a cargo de la investigación, que la sesión para la que fue citado el día 15 de noviembre sería suspendida; sin embargo, pese a eso, decidió acudir.
Por lo que, al recibir la información de que se le aplicaría una detención preliminar que posteriormente sería extendida a prisión preventiva el 19 de noviembre, decidió tomar medidas.
"Así se usa abusivamente de los procedimientos penales para humillar a los adversarios políticos y se comienza acusando de lavado de activos porque según se dice, el dinero de la conferencia habría provenido de actividades ilícitas de Odebrecht", adujo.
Finalmente, García Pérez defendió que no existe declaración ni delación acusatoria en su contra, y reiteró su participación en 48 diligencias fiscales y judiciales.
"Todos estos hechos demuestran la persecución política así como el nivel de prepotencia y temor que hoy vive el país. Son hechos, frente a rumores con los que se quisiera afectar mi libertad, lo que no permitiré sin defensa", precisó.