Los restos de la niña que fue asesinada y calcinada en San Juan de Lurigancho vienen siendo velados por su familiares. El dolor de la familia es más que evidente y no es para menos. La pequeña niña fue a sus clases de verano, desapareció y le arrebataron la vida.
La familia. Pero son los familiares de la niña de 11 años los que piden y reclaman justicia y que la muerte de la pequeña no queda impune. Como se recuerda, el cuerpo de la niña fue encontrado a unas cuadras de la Comisaría de Canto Rey, San Juan de Lurigancho.
"Pido que se agilicen (las investigaciones), que haya justicia, y pediría la pena de muerte para los violadores", manifestó Jorge Vellaneda, padre de la menor asesinada hace unos días.
El caso
Jorge Vellaneda llevó a su hija a la Comisaría de Canto Rey donde estaba inscritas a un curso de bisutería. El hombre manifestó que la dejó cerca a la comisaría pero no la vio entrar.
Las imágenes que se obtuvieron de las cámaras de seguridad no son muy claras y faltan 20 segundos fundamentales para saber si la niña entró o no a la comisaría de San Juan de Lurigancho.
Se creó un grupo especial para poder investigar el caso de la niña asesinada y calcinada en San Juan de Lurigancho.
Otro video muestra que un hombre lleva a la menor en un bicicleta. Varios medios de comunicación indican que el hombre ya fue plenamente identificado y se ha iniciado su búsqueda.