Un operativo policial en San Juan de Lurigancho estuvo a punto de terminar en tragedia cuando un delincuente, en un intento desesperado por evitar su captura, intentó detonar una granada de guerra. El hecho ocurrió en el asentamiento humano Juan Pablo II, ubicado en la zona de Canto Rey.
El comandante Rolando Suárez, jefe del Escuadrón de Emergencia Este 1, detalló a RPP que el sujeto se resistió violentamente al arresto, agrediendo a los agentes durante el forcejeo.
“Este sujeto ha opuesto tenaz resistencia, ha agredido a nuestro personal, lo ha lastimado, y también ha sustraído de sus bolsillos un artefacto explosivo, una granada”, explicó.
Según el oficial, en medio del enfrentamiento, el delincuente intentó quitar la espoleta del explosivo. Sin embargo, no logró activar la granada, que terminó cayendo al suelo.
“En el forcejeo, ha intentado liberar la anilla, no logrando ello. La granada ha caído al piso. A Dios, gracias, nuestro personal, arriesgando su vida, ha podido detenerlo”, agregó Suárez.
El individuo fue identificado como Eduardo Rodríguez Montenegro, de 33 años, quien cuenta con dos requisitorias vigentes: una por tenencia ilegal de material explosivo y otra por tráfico ilícito de drogas.
Tras su detención, Rodríguez Montenegro fue trasladado a la sede de la Depincri de SJL, donde permanecerá bajo custodia hasta ser puesto a disposición de las autoridades judiciales para su procesamiento.
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