Vestido con un traje anticovid color negro, mascarilla y gorra negra, para evitar ser reconocido, un sicario de unos 40 años atacó a balazos al conductor de un volquete, en San Juan de Lurigancho. El hombre caído, pese a que se encontraba herido de gravedad, desenfundó su arma y disparó a su atacante, quien fugó herido.
Cerca de las 8:30 de la mañana y Aaron Ray Arnao Quispe (36) estaba al volante de un volquete cuando se le apareció un sujeto y le hizo señas para que baje del vehículo pesado en el paradero 2 de la antigua avenida Canto Grande.
Un sicario de unos 40 años atacó a balazos al conductor de un volquete, en San Juan de Lurigancho.
Un sicario de unos 40 años atacó a balazos al conductor de un volquete, en San Juan de Lurigancho.
Cuando ambos estuvieron frente a frente, el desconocido desenfundó una pistola y le disparó en las piernas a Aaron Arnao, quien cayó herido a la pista y pese a las heridas en ambas rodillas, sacó una pistola y disparó varias veces a su atacante a quien hirió a balazos. Ambos quedaron heridos a una distancia de 50 metros. El primer atacante se arrastró por el pasaje Las Ceibas hasta una calle donde lo esperaba un auto sospechoso, cuyo ocupante, lo arrastró y subió al vehículo en el que se lo llevó con rumbo desconocido.
“El herido fue trasladado al hospital Hipólito Unanue donde quedó detenido. En la escena se encontró dos armas con cacerinas. Se trataría de un ajuste de cuentas”, informó el coronel Gilberto Castañeda, jefe de la División Policial Este 1.
