Terminó en el piso y rendido ante los policías. Juan Alberto Mamani Lizárraga (44), quien pertenecía a una banda que robaba modernas camionetas y luego extorsionaba a sus dueños exigiéndoles fuertes sumas de dinero, fue capturado por la Policía en medio de un operativo realizado en Los Olivos. Cayó cuando transportaba accesorios de un vehículo que él mismo había descuartizado.
En horas de la mañana, detectives de Inteligencia del Departamento de Investigación Criminal (Depincri) de Los Olivos lo ubicaron cuando se desplazaba en una minivan, blanca, de placa COI-88, por una paralela a la avenida Universitaria, en el asentamiento humano 'Los Olivos'. Llevaba varios asientos que acababa de desmantelar.
Pistolas en mano y con la guardia en alto para evitar sorpresas, los agentes cercaron a Juan Mamani sentado en el asiento del chofer.
El operativo fue exitoso. El presunto delincuente terminó en el piso para ser revisado a fin de saber si tenía algún tipo de armas.
Luego que fue reducido, el sospechoso llevó a una cochera a los agentes, en la manzana 28 del asentamiento humano 'Los Olivos', en Los Olivos, y allí se encontró una camioneta Hyundai, negra, de placa ACO-653, que había sido hurtada el 6 de octubre, en la urbanización Villa Victoria, en Surquillo.
Estaba desmantelada
"Los accesorios que llevaba eran de este carro y los estaba trasladando al 'Amauta' (zona informal de venta de autopartes de dudosa procedencia ubicada en Cercado de Lima) para venderlas a 500 soles", señaló al ser arrestado.
La propietaria del vehículo sería una mujer que trabajaría en la municipalidad de Surquillo y que contó que la dejó estacionada en la puerta de su casa. Ella agregó que, horas después del hurto, un familiar recibió llamadas telefónicas de extorsionadores que le pedían una alta suma de dinero.