Los conductores que transitaban por el kilómetro 23 de la Panamericana Sur, en el distrito de Lurín, Lima, encontraron el cadáver de un hombre junto a la carretera.
Avisaron de inmediato a la comisaría del distrito, y la Policía de Lurín llegó rápidamente, acordonando el área y convocando a los detectives de Criminalística.
Al llegar, los peritos observaron huellas en el suelo que supuestamente pertenecían al vehículo usado por quienes abandonaron el cuerpo.
El informe preliminar indicó que el cadáver era de un joven de aproximadamente 30 años y que había sido dejado durante la noche en una zona sin alumbrado público y completamente oscura.
Con la llegada de la fiscal, los forenses comenzaron a inspeccionar el cadáver y no encontraron documentos de identidad, por lo que tomaron muestras de sus huellas digitales para su posterior identificación.
El cuerpo presentaba heridas, incluyendo una en la barbilla y otra en la nuca, además de tatuajes en las costillas y el pecho que, aunque comunes, no proporcionaron información específica.
Las autoridades realizaron el levantamiento del cadáver y el caso quedó a cargo del Departamento de Investigación Criminal de Lurín-Pachacamac, quienes continuarán con las investigaciones.
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