
¿QUIÉN LO DEJÓ LIBRE? La captura de Jesús Alberto Chanchamire Ibarra, alias ‘Petare’, tras el asesinato del suboficial PNP Juan Carlos Díaz Chapoñán, en Los Olivos, destapó un historial criminal que indigna a las autoridades. El propio ministro del Interior, Carlos Malaver, confirmó que el venezolano ya había sido intervenido el año pasado por delitos de trata de personas con fines de explotación sexual, tráfico ilícito de drogas e integración a una banda criminal.
“No entendemos cómo, con semejante prontuario, este sujeto seguía en las calles”, reclamó Malaver, recordando que la Policía cumple su labor de captura, pero que son otros operadores de justicia los que deben garantizar que los delincuentes sean sancionados.

“Por favor, un llamado a los demás operadores de justicia, ser más céleres, ser más diligentes y sobre todo, al encontrarnos en un escenario tan complicado, tienen que actuar también”, agregó el titular del Mininter.
Los archivos policiales revelan que Chanchamire Ibarra no solo estaba vinculado a redes de explotación sexual en Lince, sino que también formaba parte de la organización criminal One Family, que disputa a sangre y fuego el control de esa plaza con el Tren de Aragua y la banda de Los Escorpiones.
UN BLANCO EN LA GUERRA DE MAFIAS
En 2023, ‘Petare’ fue el objetivo real de un atentado ocurrido en Lince, donde terminó muerto Adrián Alejandro Leañez Vargas, un presunto proxeneta que había sido invitado a una “noche de juerga” por dos mujeres. Según la Dirincri, el ataque fue ejecutado por sicarios en lo que sería un ajuste de cuentas.
La disputa por el dominio del negocio sexual en el distrito mantiene enfrentados a grupos criminales venezolanos y peruanos. En esa guerra, Chanchamire Ibarra ocupaba un rol clave como lugarteniente, moviéndose entre bares, hoteles y puntos de captación de víctimas.

A pesar de las evidencias, el venezolano fue liberado en anteriores intervenciones. El Mininter reveló que fiscales de Lurín lo dejaron en libertad tras haber sido detenido por tráfico ilícito de drogas y tenencia ilegal de armas de fuego.
La madrugada del ataque en Los Olivos, Chanchamire Ibarra habría conducido la motocicleta desde la cual un segundo implicado —aún prófugo— disparó contra el suboficial Díaz Chapoñán y su compañero. El crimen dejó además a otro agente gravemente herido.
La hermana del policía caído exige justicia y respuestas claras: “Queremos saber por qué lo dejaron solo, por qué no actuaron inmediatamente. Queremos justicia para él”.
Mientras la PNP refuerza el Plan Cerco para capturar al cómplice, el caso vuelve a encender la polémica sobre la liberación de delincuentes con antecedentes graves y la urgencia de cerrar los vacíos que les permiten seguir delinquiendo en las calles.











